El presidente de la DNCD afirma sí es posible combatir el narcotráfico en RD

El presidente de la DNCD afirma sí es posible combatir el narcotráfico en RD

Seminario regional sobre implementación de la RCSNU, 1540-2004.Fortaleciendo el comercio estratégico y los controles en améria latina y el caribe,en el salón diplomatic, hotel embajador,en la foto Félix Alburquerque Comprés, ARD., vice ministro de Defensa para Asuntos Navales y Costeros/foto Jose de León

El presidente de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), vicealmirante Félix Alburquerque Comprés, afirmó ayer que sí es posible combatir el narcotráfico y limpiar a la sociedad del cáncer que la está consumiendo, pero destacó que ese tema no se puede manejar con populismo.
El nuevo incumbente del organismo antinarcóticos expresó que existen los planes para enfrentar ese flagelo, y que de hecho tienen el mapeo criminal del narcotráfico y las zonas más vulnerables, el cual se aplicará con la integración de la Procuraduría General de la República, como cabeza de investigación, la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas.
Alburquerque Comprés ofreció las declaraciones en el programa El Gobierno de la Mañana, que se difunde por la emisora radial Z 101.
El funcionario dijo que la lucha contra el narcotráfico no es tarea fácil, inclusive para los países más desarrollados y con más recursos económicos que la República Dominicana.
Al hacer esa observación dijo que el combate no es solo responsabilidad del Gobierno, sino también de la ciudadanía que debe denunciar dónde están los puntos de drogas.
Sobre el temor que tienen los ciudadanos de denunciar situaciones vinculadas al narcotráfico, Alburquerque Comprés expresó que la DNCD tiene una línea de denuncia que se maneja con absoluta discreción.
En ese sentido dijo que se necesita más colaboración de la ciudadanía porque actualmente se reciben muy pocas denuncias.
Las garras del narco. Sobre la penetración del narco en instancias policiales y militares expresó que en todas partes el dinero corrompe.
“En la gestión del presidente Danilo Medina y el teniente general Rubén Darío Paulino Sem, y del mayor general Ney Aldrin Bautista se han expulsado de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional miles de miembros vinculados a ese flagelo”.
“Muchas cosas no se conocen para no afectar las investigaciones que a veces están vinculadas con agencias internacionales. Puede estar permeada la judicatura, el empresariado porque somos vulnerables ante este negocio que enriquece rápidamente a las personas”.
RD desprotegida. Al vicealmirante se le planteó si, ante la fuerza del crimen organizado vinculado al narcotráfico la Répública Dominicana está desprotegida.
En ese sentido expresó que hace unos años el gobierno norteamericano redujo fondos para sus Fuerzas Armadas, y como consecuencia hubo recortes en agencias que luchan contra el narcotráfico.
Esa situación obligó a que el país retirara de zonas costeras varios radares prestados por Estados Unidos, cuyo costo de mantenimiento era muy oneroso.
Sin embargo dijo que el país no está desprotegido, que la Armada de la República Dominicana tiene unidades navales, lanchas interceptoras que ponerlas en operación cuesta mucho dinero.

“Mantener 8,10, 15 o 20 unidades navales constantes en las costas conlleva un gran presupuesto”.
En cuanto a los radares dijo que es imposible para el país adquirir equipos de ese tipo, porque el costo aproximado de solo uno ronda los cinco millones de dólares.
“Hemos reducido el narcotráfico, en la gestión pasada se multiplicaron las incautaciones, pero la producción de cocaína se ha cuadruplicado”.
Sobre el populismo. Alburquerque Comprés expresó que la lucha contra el narcotráfico es delicada, por lo tanto no se puede hacer populismo con ésta.

“Con el narcotráfico no se debe hacer populismo porque eso inquieta a la ciudadanía, no magnifiquemos las cosas para ganar popularidad, eso le hace un daño irreparable a la sociedad y crea descrédito en las autoridades, hay que denunciar cosas aceptables y creíbles”, dijo.
En otro orden lamentó que la juventud de este tiempo quiere lucrarse rápido, no quiere trabajar, porque la sociedad le ha vendido que el éxito debe ser rápido.

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