El presidente Hipólito Mejía recibió ayer los saludos de las autoridades eclesiásticas, consulares, funcionarios civiles y militares, así como de empresarios, en un acto que se llevó a cabo en el salón de Embajadores del Palacio Nacional.

La actividad se inició a las 9:00 de la mañana y finalizó quince minutos después de las 11:00. El mandatario estuvo acompañado de su esposa, doña Rosa Gómez de Mejía, la vicepresidenta Milagros Ortiz Bosch y del secretario de Relaciones Exteriores, Francisco Guerrero Prats.

Entre los primeros en saludar al mandatario estuvieron el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez; el nuncio apostólico del Papa Juan Pablo II, monseñor Timothy Broglio y monseñor Agripino Núñez Collado, rector de la Universidad Católica Madre y Maestra (UCMM).

Asimismo, saludaron al mandatario, los encargados de negocios de Nicaragua, España, Costa Rica, Venezuela, Honduras y el representante del Fondo de las Naciones Unidas para la Alimentación, Nicki Fabianci.

También saludaron al mandatario, el embajador de la Unión Europea (UE), Miguel Amado y la encargada de Negocios de la embajada de Estados Unidos en la República Dominicana, Mary Marshall.

Fue notoria la presencia de los reformistas, Amable Aristy Castro, presidente de la Liga Municipal Dominicana (LMD) y de los diputados Ito Bisonó y Noé Esterling Vásquez.

También estuvieron presentes en el acto, los empresarios José Luis Corripio Estrada (Pepín), Marino Ginebra y Diego de Moya Canaán, Eulalio Peralta, así como Mary Pérez de Marranzini.

Entre las autoridades militares estuvieron, el secretario de las Fuerzas Armadas, teniente general José Miguel Soto Jiménez y los jefes del Ejército Nacional, Marina de Guerra y Fuerza Aérea (FAD) y de la Policía Nacional, mayores generales, Jorge Radhamés Zorrilla Ozuna; vicealmirante Eurípides Uribe Peguero, Virgilio Sierra Pérez y Jaime Marte Martínez, respectivamente.

[b]GAJES DEL OFICIO[/b]

Durante el acto protocolar de salutación al Presidente de la República, ocurrieron cosas «muy especiales” y que formarían parte de los «gajes del oficio».

En el acto «se colaron» muchos que tuvieron acceso al Salón de Embajadores, como es el caso de un periodista hainero que cuando fue «de sabroso» a saludar a la primera dama, doña Rosa Gómez de Mejía, ésta le saludó con «un stop» en el hombro para que no se le acercara.

Asimismo, un hombre que se hace llamar seguidor del Presidente Mejía y que solo es conocido en la sede del Palacio Nacional como «Blanquito», cuando se vio en la fila y acercándose al mandatario para ofrecer el saludo, comenzó a vociferar «doce años», por lo que el coronel Víctor Lachapelle de los Santos, sub jefe del Cuerpo de Ayudantes Militares, tuvo que llamarle la atención y quitarle un «bulto» que siempre carga.

También, llegó hasta la figura presidencial Héctor Castillo «El Telépata» con una «tablita misteriosa» que le mostró al mandatario y que éste al ver esto, no hizo más que sonreír y hacer un ademán al autor de que «¿Cómo haces eso aquí?».

Pero la que puso la «tapa al pomo» fue María de los Angeles Castañeda, a quien el mandatario llama «Angelita». Esta mostró una fotografía al presidente Mejía, en la que se encontraban juntos, en señal de que se trata de «una figura» muy cercana a él; pero no conforme con ello, permaneció varios minutos secreteándole al mandatario, quien mostraba preocupación por las personas que seguían esperando en la larga fila de dos horas y quince minutos.

En efecto, los custodias del Cuerpo de Ayudantes Militares, la «ayudaron» a salir del salón, luego de gritos y empujones.