POR LEONORA RAMÍREZ S.
Hay un vacío de liderazgo en el ámbito mundial para enfrentar el calentamiento global, consideró José María Figueres, ex presidente de Costa Rica, quien resaltó que los Estados Unidos debería dar el ejemplo al asumir el Protocolo de Kyoto.

Durante su participación en el almuerzo del Grupo de Comunicaciones Corripio dijo que el 32 por ciento de la contaminación de carbono procede de Estados Unidos, y que a partir de 2008 esa cifra será incrementada por China.

En ese contexto planteó que todos los países deben aplicar políticas que detengan el calentamiento global, así sean subdesarrollados.

Sobre ese aspecto citó varias medidas preventivas, entre esas conocer la problemática para saber cómo mitigar sus efectos.

Asimismo, que desde el área gubernamental se tomen las acciones que mitiguen sus efectos.

Para resaltar la importancia de las medidas gubernamentales puso como ejemplo el caso de la frontera domínico haitiana, en el sentido de que en el lado dominicano la zona se ve reforestada, y en el haitiano absolutamente lo contrario.

La frontera entre República Dominicana y Haití está claramente dibujada porque esté país tiene unas políticas con respecto a lo que es la reforestación, pero Haití no tiene nada, expresó.

Un tercer componente es la responsabilidad de cada ciudadano al utilizar racionalmente los combustibles.

En ese sentido, expresó que el 7% de la demanda energética en España la consumen electrodomésticos que se dejan encendidos sin necesidad.

Asimismo, que el reporte de la Agencia Internacional de Energía, del 2006, establece que el 65 por ciento de las emisiones de carbono se podrían reducir con sólo administrar la demanda energética.

Los ciudadanos deben demostrar que están dispuestos a cambiar ciertos hábitos por el futuro de la humanidad, expresó Figueres.

LOS EFECTOS EN RD

Con relación a los efectos que tendrá el cambio climático en la República Dominicana, el ex mandatario advirtió que dentro de 25 años el nivel del mar en la isla podría aumentar hasta un metro.

Eso produciría daños a la infraestructura, al sector turístico, a la industria, y a las propias agencias aseguradoras de esos bienes. Pero las consecuencias del cambio climático no están tan lejanas, pues a juicio de Figueres ya se ven por el deshielo de los océanos y el incremento de las tormentas.

Todos tenemos la responsabilidad de entender lo que ocasiona el cambio climático, y asimismo la oportunidad de mitigarlo con nuestras acciones, dijo el ex mandatario.

Extender el protocolo de Kyoto

En términos globales consideró que se debe avanzar hacia un segundo acuerdo, parecido al de Kyoto, que se extienda más allá de 2012 y que le permita a los países converger hacia un convenio más comprensivo, inteligente y solidario.

El futuro: la energía nuclear

El futuro energético va a requerir de mucho aporte tecnológico, es indiscutible que en esa mezcla energética que tengamos en el futuro tendremos un poco de todo, pero una preeminencia de los combustibles fósiles, renovables ojalá en mayor porcentaje, carbón, y por eso la necesidad de que las plantas de última generación, que son más limpias cuando queman ese carbón, indicó el ex presidente.

En los próximos 30 a 40 años petróleo se seguirá usando.

En el futuro las plantas nucleares volverán a ser una opción importante, no como las grandes plantas del pasado, sino más pequeñas, refirió.

Nos costará acostumbrarnos a la idea porque es una energía limpia, pero eso lo podremos tener cuando haya una agencia internacional que se responsabilice del combustible nuclear.

Para que no sean los países que tengan que generarlo y estén sujetos a la tentación de enriquecerlo con otras ideas, dijo Figueres.

Con relación a los cuestionamientos de los presidentes Hugo Chávez y Fidel Castro a la producción de etanol, a través de maíz y de caña de azúcar, Figueres dijo que esa solución es viable aunque no les guste a los países petroleros.

Para esos mandatarios se sacrificaría la alimentación por los combustibles.

Breve biografía

José María Figueres fue presidente de Costa Rica de 1994 a 1998.

Es consejero delegado del Grupo Felipe IV, que promueve los valores democráticos en el mundo.

Forma parte de los consejos directivos de World Resources Institute, Earth Council Geneva y el Grupo San Cristóbal.

En el gobierno de Oscar Arias Sánchez (1988) fue ministro de comercio exterior, así como de agricultura y ganadería.

En el 2000 fue asesor para asuntos tecnológicos de la Organización de las Naciones Unidas.

Su padre fue José Figueres Ferrer, presidente de Costa Rica en tres ocasiones.