Altos dirigentes del gobernante Partido de la Liberación Dominicana (PLD), amenazan con tinte de chantaje a dirigentes del Partido Revolucionario Moderno (PRM), a quienes “responsabilizan” de actos violentos pudieran ocurrir el próximo 16 de agosto, al momento escogerse los bufetes directivos en salas capitulares.
Ahora que se avecina la escogencia de bufetes directivos en las alcaldías de los municipios del país, se siente aprensión por lo que pueda suceder, ya que en muchos ayuntamientos la oposición, entiéndase el PRM y el PRSC, tienen mayoría de regidores, por lo que si van unidos a esas escogencias, muchos de esos bufetes caerían en manos de la oposición y los alcaldes no podrían hacer las diabluras que cometen, cuando todo está bajo su control.
El PLD ha desempolvado la denominada “regla de oro”, un invento del vilipendiado José Francisco Peña Gómez, que establece el otorgamiento mecánico de la presidencia de los cabildos a una persona perteneciente al partido del síndico.
Los partidos Revolucionario Moderno (PRM) y Reformista Social Cristiano (PRSC), no deben caer en esa trampa, aún más, sabiendo que el PLD ha irrespetado todas las normas establecidas para una convivencia pacífica.
Lo que debería tocarle al PRM es endurecer sus posiciones de oposición, porque de lo contrario, que se despida, ya que no será gobierno nunca. La gente le está cogiendo la seña, y ya muchos expresamos que lo que existe es un maridaje entre las cúpulas de los partidos. El PRM debe desmentir esa creencia, tomando acciones que nos convenzan de que realmente es un partido de oposición, y no un grupo de hombres en búsqueda de “su manteca”.
El país reclama cambio de rumbo en la conducción del Estado, un gobierno que fortalezca nuestras instituciones.