En mayo 16 la mayoría absoluta de los dominicanos y las dominicanas pasó factura a un gobierno responsable principal de la mayor crisis económica en la historia de la República, causante de un aumento de la pobreza y reducción del ingreso real de las mayorías, pero que también acumuló una serie de desaciertos en el orden institucional.

Aliviado, emocionado por la demostración de civismo de toda una sociedad que decidió asumir el protagonismo de su futuro y retornar al camino del crecimiento con estabilidad, pasó revista a un año de artículos, de aportes mediáticos dirigidos al esclarecimiento de las causas reales de la crisis, la responsabilidad del gobierno del PPH, la inconveniencia de la reelección y las alternativas disponibles al electorado.

«Aparte de la resistencia en su propio partido, la reelección o el triunfo de una repostulación, enfrenta además del natural desgaste del gobierno, serias limitaciones fiscales y monetarias que restringen los grados de libertad a esta administración para construir, aunque sea artificialmente, un escenario económico que motive a las mayorías a volcarse en las urnas» (Obstáculos Macroeconómicos a la reelección. 5/mayo/2003)

«En conclusión , estamos en presencia de un gobierno carente de credibilidad, que ha gastado su prestigio manteniendo en zozobra a la opinión publica, llegando a un punto sin retroceso en que solo un acuerdo con el FMI y el cumplimiento de las metas modificaría las expectativas y llevaría la tranquilidad a los mercados cambiarios» (Tensión política crea inestabilidad cambiaria. 25/enero/2004)

«Un nuevo gobierno sin compromiso con la crisis, un nuevo gobierno refrendado por el sufragio popular y un nuevo gobierno respaldado por la comunidad financiera internacional representa la única alternativa para superar la peor crisis financiera en la historia de la República y retomar el camino del crecimiento y el progreso» (Se pospone solución a la crisis. 26/enero/2004)

«Desde la primera emisión de bonos soberanos hasta la triplicación de la deuda con la banca y la duplicación de la deuda externa, desde el pago de todos los depositantes hasta la ruptura del primer acuerdo con el FMI, este gobierno es responsable de la gestación y del agravamiento de la crisis, responsabilidad que no se puede atribuir a errorres en la conducción económica, pues todas las decisiones en cada momento han sido calculadas respondiendo a la lógica del continuismo y la reelección» (política económica en tiempos de reelección. 11/marzo/2004)

«Si a mayo del pasado año existían serios obstáculos macroeconómicos a la reelección, diez meses después, independiente de la «reunificación» del PRD y la puesta en marcha de la maquinaria electoral del PPH al calor de la utilización de los recursos del estado, existen barreras insalvables para mercadear un proyecto continuista en un escenario donde la inflación acumulada desde el 16 de mayo del 2002 se aproxima al 100% y el valor del peso se redujo casi a la tercera parte, llevándose de encuentro la capacidad de compra, la calidad de vida y las esperanzas de las mayorías» (Barreras macroeconómicas a la reelección 11/marzo/2004)

«La cita cívica del 16 de mayo no se reduce a una simple consulta para cambiar un gobierno o reelegirlo; se trata de aprobar o reprobar políticas que han conducido a la crisis financiera más grave en la historia de la República y más que nada a elegir el candidato con las mayores potencialidades para enfrentarla o con las mayores desventajas como para empeorarla» (Lo que esta en juego el 16 de mayo. 24/abril/2004)

«Una administración responsable fundamental de la crisis carece de las respuestas para enfrentar el déficit cuasi-fiscal y su equipo de asesores muestra, en adición, un extraordinario déficit cuasi-mental ya que, incapaces de articular para el Presidente un discurso convincente en relación a este tema, han optado por esparcir mentiras y poner al candidato a repetirlas en el momento más inadecuado, justo cuando se advierte que los certificados están agotado su capacidad desmonetizadora» (Déficit cuasi-fiscal y déficit cuasi-mental. 7/mayo/2004)

«El próximo 16 de mayo los ciudadanos y las ciudadanas ejerciendo su derecho se harán dueños de su destino y depositando el voto estarán jugando el destino del país, pues por un camino se va a la superación de la crisis y el retorno a los tiempos del crecimiento con estabilidad, mientras por el otro marchamos hacia el agravamiento de la situación presente y quizás al colapso financiero e institucional» (El 16 de mayo nos jugamos el destino del país. 14/mayo/2004)

El 16 de mayo, aparte de marcar pasos firmes en la consolidación del proceso de democrático y la transparencia electoral, la mayoría de los dominicanos y las dominicanas reprobó al gobierno del PPH y colocó los destinos del país en manos del doctor Leonel Fernández, confiados en que devolverá la confianza y el orgullo nacional merced a encabezar un gobierno decente, respetuoso, austero, concertador, de unidad nacional y dispuesto aplicar las políticas capaces de vencer las crisis económica e institucional.