El trato denigrante de un vigilante a un músico negro o la imposición de una escuela para que un niño se cortara su cabello estilo afro son ejemplos del “racismo estructural” en Panamá, un fenómeno en el que un grupo de jóvenes realizadores de esta etnia quieren profundizar usando el cine como herramienta.
“Precisamente, el arte y el cine, son herramientas muy potentes para poder sensibilizar y poder reducir estas expresiones” racistas, dijo Abel Aronátegui, gestor cultural, director y productor de cine, radio y televisión, en una charla con motivo de celebrarse en mayo el Mes de la Etnia Negra en Panamá.
Aronátegui y los noveles cineastas Risseth Yanqüez y Said Isaac reconocieron, sin embargo, que es complicado y difícil dignificar la negritud en Panamá, pues es casi inexistente el cine hecho por negros en el país, pero que les toca asumir este reto.
Podría interesarle leer: Pese a coronavirus protestan en varias ciudades contra el racismo
“Es un reto ser negro y querer ser cineasta en Panamá, aún sigue siendo así (…) porque sí, todavía seguimos viviendo en un país muy racista”, manifestó Isaac en intervención en el foro, convocado por la Biblioteca Nacional y dirigido por el productor de cine y activista de derechos humanos, Aris Rodríguez.
EL RACISMO ESTRUCTURAL EN PANAMÁ
El trato denigrante de un vigilante de seguridad privado de un supermercado al joven músico Joshua Ashby cesó cuando este le dijo que se graduó en Berklee College of Music y que era integrante de la Sinfónica Nacional.
Para los grupos afropanameños que se pronunciaron en su momento, este y otros incidentes tienen como raíz “el racismo estructural y la discriminación racial que permea la sociedad” y se expresa a través del “perfilamiento racial, abuso policial, maltrato, humillación, invisibilidad, exclusión y marginalidad social».
Lea también: “Nunca entenderé por qué permitimos el racismo», dice Rosalía
Un racismo estructural que para muchos se traduce en la falta de datos censales confiables sobre la población negra del país, toda vez que estas organizaciones y algunos de sus activistas estiman que al menos uno de cada cuatro panameños tiene origen afro.
Denuncian también que abona a este racismo estructural la no inclusión en el currículo escolar de la historia y aporte de los afropanameños, pero entre sus conquistas destacan el Día de la Etnia Negra y la Secretaría Nacional para el Desarrollo de los Afropanameños, creadas por ley en 2000 y 2016, respectivamente, entre otros espacios ganados.
“Nosotros tenemos en Panamá una situación muy complicada en temas de racismo estructural, de que todo lo que está relacionado a la afrodescendencia, a la negritud, genera ruido”, afirmó Aronátegui, creador de la Fundación Contra-Peso para fortalecer la identidad de la juventud afrodescendientes a través de la creatividad, en la provincia caribeña de Colón.
Te invitamos a leer: Piden fin racismo en aniversario marcha de Martin Luther King Jr.
Aronátegui y su Fundación tienen la “Muestra de Cine Afro”, un espacio para exhibir cintas de las realidades que vive la población negra desde los niveles de “desigualdad, la pobreza y la exclusión de género que sufren las mujeres” de esta etnia.
A su vez, Said Isaac es creador de la Fundación Mente Pública y el Festival de Cine Pobre Panalandia, abierto para que “cualquier persona, ya sea de cualquier color de piel o cualquier género pueda sentirse que Panalandia es un espacio que los está esperando” para que ingresen al arte del cine.
Risseth Yangüez, que trabaja en su primer largometraje, “Cuscú”, sobre la historia afropanameña contada a través de su abuela, dijo que la cinta surge a partir de la pregunta de “por qué me tengo que alisar el cabello” afro. Esta pregunta, según Yangüez, “detona toda una búsqueda personal para entender el por qué de la discriminación, del racismo y de la negación en Panamá hacia nuestra negritud».
LOS DERECHOS HUMANOS
En la Defensoría del Pueblo de Panamá existe la Unidad de No Discriminación que atiende los casos de discriminación racial o racismo, que son denunciadas por las organizaciones afro cuando se dan en la esfera laboral y educativa, entre otras, dijo a Efe Iris Reyes Lindo, Oficial de dicha unidad.
Quizás te interese: Kamala Harris: La xenofobia es real en Estados Unidos el sexismo, también
Reyes detalló que entre 2015 a 2019, del 100 % de las quejas que llegaron a la unidad, “el 73 % estaban vinculadas al tema de discriminación racial o racismo” contra personas de la etnia negra.
En 2020 durante la pandemia se recibieron 10, la mayoría hacia otra población que es la LGBT, y 6 en 2021 sobre el uso de trenzas, cabello afro y vestimenta en lo laboral y educativo.
La funcionaria recordó que en Panamá no hay una ley que tipifique penalmente el racismo, y la Defensoría como institución de derechos humanos solo puede emitir “sanciones morales».