El recordatorio de Temo

El recordatorio de Temo

Claudio Acosta.

Tal vez sea demasiado tarde para llorar sobre la leche derramada,  pero de cuando en cuando conviene que alguien le recuerde al PLD y a los peledeístas que el ejercicio del poder les ha hecho extraviar el rumbo, por lo que  ya no son ni la sombra del partido  disciplinado que privilegiada la ética y la formación política de sus miembros que alguna vez fue bajo el liderazgo inspirador del profesor Juan Bosch. Y si quien se toma la molestia de hacer ese incómodo  y doloroso recordatorio es el ingeniero Temístocles Montás muchísimo mejor, pues si hay alguien que puede ser testigo de primera mano de ese proceso degenerativo es precisamente  el actual Ministro de Industria y Comercio, quien afirma que el personalismo y la indisciplina han hecho metástasis en un partido “donde el dinero lo ha corrompido todo”. El funcionario pronunció una conferencia el fin de semana  en la Casa Nacional, con el  título “Los 43 años de fundación del PLD y los 20 años de su llegada al poder”, donde dijo cosas como esta: ”….el PLD se ha convertido en un mecanismo de ascenso individual en donde predomina el pragmatismo, la ausencia de ideas, acompañado del abandono de los principios; todo lo que criticó Juan Bosch en el viejo PRD, hoy lo estamos viendo en el PLD. Hoy la elección de un compañero a una posición electiva no depende  de su capacidad y su trabajo al interior del partido sino del poder económico que tenga”. Descrito ese panorama, la pregunta es inevitable: ¿tiene salvación el PLD; está a tiempo para reencontrarse con sus principios fundacionales? Temístocles Montás cree que sí, pero solo si los correctivos se toman cuanto antes, pues si se dejan para cuando el PLD salga del poder, “como piensan algunos dirigentes”, será demasiado tarde. Y estoy de acuerdo, pues el poder, sus dulces y gratificantes privilegios, es hoy por hoy su peor enemigo, aunque esa afirmación le suene a herejía a sus compañeros del Comité Político.

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