UBI RIVAS
El Partido de la Liberación Dominicana (PLD) se apresta a proclamar como su candidato oficial a la Presidencia de la República en los comicios del 16 de mayo venidero, al presidente Leonel Fernández, el 27 de este mes de enero, y todos los sectores sensatos intra y extra del partido morado, aspiran y confían en que Danilo Medina aprovechará la circunstancia para retornar al proselitismo político.

Retornará Danilo al activismo político porque quien suscribe, que nunca ha militado en ninguna parcela política, aunque sí apoyado a varios candidatos del PRD y del PLD, intuyo que es lo más apropiado, sensato, correcto, retibutivo y acertado para dar un espaldarazo a la reelección que persigue Leonel.

Danilo, que es un ser humano sumamente inteligente, agudísimo, perspicaz, sereno, sensato, leal a su PLD, en el fondo de su alma básiga de Leonel aunque la confrontación intra-partido lo hayan distanciado coyunturalmente, más que muchos tiene que dar por sentado que Leonel es el amo de la coyuntura política del momento.

No hay un líder hoy por hoy en el país, mucho menos en el PLD, que supere a Leonel, y cuando expreso la palabra líder arracimo al que consigue agrupar en torno suyo a las grandes mayorías y de inmediato se encuentra con la figura de Leonel.

Tanto así, que el día nueve de este mes Leonel consiguió que los diputados aprobaran, sin una pizca de modificación, el instrumento clave en la economía de todos los países del mundo, la Ley del Presupuesto, con votación de 94 a favor, tres en contra y 34 del PRD que no votaron.

El Senado había sancionado previamente la pieza en su sesión del día cuatro de enero y en los dos hemiciclos, sin añadirle ni quitarle ni una coma al original remitido por Leonel.

Si a eso no se llama liderazgo entonces habrá que hilvanar hondo para inventar otra palabra y otro categoría que lo defina.

Que papeleta mató a menudo, que se complacieron a legisladores para que llevaran debajo del brazo sus ONG, eso acontece siempre, ¿o es la primera vez? sin que necesariamente exprese que es lo correcto, ni debido, ni ético, pero real.

Como es Leonel no un presidente ideal para muchos, el suscrito incluido, pero sí el presidente real porque ganará con un conteo de un 62% la primera vuelta de la lid electoral próxima. Anote tío, como decía en sus tertulias diarias en su hogar mi inolvidable y querido Ramón Alberto Font Bernard.

Quizás la decisión de Leonel «picar» de nuevo proseguir a horcajadas sofocantes detentando los relámpagos del mando supremo precisamente pudieron impulsarlo a que el PLD debe continuar en el poder hasta por lo menos 2012, y Danilo no garantizaba esa expectativa recordándose que perdió los comicios de 2000 de Hipólito Mejía.

Leonel no podía aventurar al PLD a otra experiencia como la de 2000 porque, además, su liderazgo hubiese podido difuminarse en la neblina de la semoviencia de los tiempos, y esa no es la cosmovisión que anida en su concepción política.

Ha demostrado Leonel que es un ganador nato, un explotador de coyunturas, de momentos históricos fugaces, que han estado de su lado, que él ha sabido cortejar, aprovechar, como la última instancia, Noel y Olga que en vez de como algunos piensan, le perjudicará, este servidor interpreta que lo catapultará aún más.

Es lo mismo que aconteció con el generalísimo Rafael Leonidas Trujillo cuando el ciclón de San Zenón, cinco en la escala Saffir-Simpson vapuleó al país el 03-09-30 a 19 días exactos de asumir el poder el 16-05-30 y lo que hizo fue garantizarlo en el poder por 31 años y siete meses.

El Jefe mudó el gobierno a Santiago de los Caballeros, porque el vicepresidente Rafael Estrella Ureña y otras figuras se habían ido allí, y desde allí, El Jefe dispuso de todas las providencias que lo solidificaron en el poder. ¿O no?