El hospital Robert Reid Cabral logró bajar la cifra de mortalidad durante los fines de semana, para lo cual sus autoridades mantienen una supervisión permanente con todos los médicos de servicio.

El doctor Clemente Terrero, subdirector del centro, asegura que comparado con el mismo período del año pasado, el hospital tiene una reducción de mortalidad infantil de un 33%.

Un día como hoy, hace tres meses, los doctores José Miguel Ferreras y Terrero asumieron la dirección del centro, tras un escándalo nacional que generó la muerte durante un fin de semana, de 11 niños, lo que generó un gran debate nacional.

Para el especialista, no se puede perder de vista el contexto social del país, los niños llegan en condiciones críticas. El hospital es el último eslabón adonde llega el paciente.

En un fin de semana pueden morir hasta cinco niño, pero se trata, insiste, de menores que llegan críticamente enfermos por patologías cardíacas, tumores terminales, accidentes de tránsito y otras enfermedades.

Acciones. Para bajar la mortalidad infantil en el hospital, se han realizado reuniones con los médicos de cada área. Se les insiste en que el centro tiene un compromiso nacional con bajar el indicador de la mortalidad infantil y neonatal.

Asimismo, se mantienen los contactos y reuniones permanentes con los médicos residentes. Ellos están más atentos y ante cualquier eventualidad, llamar de inmediato a las autoridades.

Se mantiene una gran vigilancia en el hospital; ya no hay una alta mortalidad por infecciones intrahospitalarias. En ese tipo de infecciones se mantiene una labor permanente y ya no hay hacinamiento en la emergencia, señaló Terrero.

En lo que respecta al área de infecciones intrahospitalarias, se hizo un levantamiento y se limpiaron las diferentes áreas. Indica que no se registran microorganismos patógenos, lo cual tiene una gran importancia en la calidad del servicio que reciben los niños.

En internamiento se dispuso la apertura de 40 camas y se abrieron servicios de gran importancia.