El robo de identidad obliga a proteger los datos de las personas

El robo de identidad obliga a proteger los datos de las personas

El 28 de enero ha sido proclamado como el Día de la Protección de los datos personales por la National Cyber Security Alliance de Estados Unidos. La celebración se inicia con un evento a realizarse en la facultad de Leyes de la Universidad George Washington.

Esta actividad cuenta con el apoyo de la Federal Trade Commision (FTC) que es la agencia de defensa a los consumidores de Estados Unidos. La comisionada de la FTC, Maureen Ohlhausen, será la  principal disertante  de un panel integrado por abogados y expertos en la protección de los datos personales

El tema de  la protección de los datos personales es una preocupación a nivel global debido a que la exposición a  través de los mecanismos que ha popularizado la tecnología ha vulnerado en gran medida un derecho fundamental como es el de la privacidad.

La tecnología le ha permitido al ser humano nuevas herramientas para avanzar hacia la simplificación de procesos en todos los aspectos de la vida, desde la ingeniería, la medicina y todo el quehacer humano, pero es solo una herramienta que debemos utilizar como tal.

En Europa, las agencias de protección al consumidor no utilizan el Tweeter como medio de comunicación con los ciudadanos, justo porque de hacerlo estarían exponiendo los datos de las personas.

Mientras de este lado del mundo nos alegramos por la facilidad con que las personas denuncian los fraudes  en su contra, el viejo mundo cuida de que sus ciudadanos no sean víctimas de una herramienta que les ha servido también a los delincuentes.

El robo de identidad es un delito que afecta a millones de personas en todo el mundo, numerosas transacciones se realizan por medio de datos robados a particulares, lo que ha obligado a los gobiernos no solo a legislar para proteger a las personas del robo de identidad sino también para garantizar hasta la propia vida de los ciudadanos.

En la página de la FTC abundan las informaciones sobre los riesgos a los que están expuestos los ciudadanos y hacen recomendaciones de tener cuidado a la hora de utilizar sus tarjetas de crédito, sus documentos, pero las mayores alertas están vinculadas al uso de los datos a través de las redes sociales.

Alertan a los padres sobre el acceso a internet de los niños, alientan a leer las condiciones de seguridad que ofrecen las redes a través del  ciberespacio, sobre las múltiples formas de fraudes, asegurar en los hogares las informaciones que puedan ser utilizadas y hasta los papeles que se vayan a tirar al zafacón.

Los datos de todos están en toda parte, ahora toca legislar para proteger a los que todavía no están porque su edad no se lo permite.

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