SAN SALVADOR— El partido Nuevas Ideas del presidente Nayib Bukele obtuvo la mayoría de las alcaldías y el control del Congreso unicameral en las elecciones en El Salvador, pese a las advertencias de sus adversarios que lo acusan de autoritario y habían pedido votar en contra de su fuerza para no darle más poder político.
Como habían anticipado las encuestas, Nuevas Ideas superó ampliamente a todas las fuerzas contendientes y dejó en una expresión mínima a la derechista Alianza Republicana Nacionalista (Arena) y al izquierdista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), que en los últimos 30 años han gobernado el país.
Con el 80% de las urnas escrutadas, Nuevas Ideas llevaba una amplia ventaja de más de la mitad de todos los votos a nivel nacional y habría ganado las alcaldías de las 14 cabeceras departamentales.
El académico Oscar Picardo, de la Universidad Francisco Gavidia, explicó que debido al sistema electoral hay que esperar el cierre del conteo de actas para dar un número exacto de diputados por cada partido, pero por las ingresadas Nuevas Ideas ya pasó un millón de votos y “va a dejar pocos espacios”.
Según la información que difunde el Tribunal Supremo Electoral, Picardo dijo que Nuevas Ideas podría alcanzar los 50 diputados más los de su aliada Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA) que le daría los 56 diputados necesarios para la mayoría calificada.
Agregó que Arena -que hasta ahora tenía 37 de los 84 diputados-, “podría andar por los 12 diputados y el Frente por ocho”.
Para la aprobación de leyes se necesitan los votos de al menos 43 de los 84 diputados, mientras que para elegir a los magistrados de la Corte Suprema de Justicia, al Fiscal General, a los magistrados del Tribunal Supremo Electoral y aprobar préstamos internacionales se requiere una mayoría calificada de 56 votos.
Aunque el nombre de Bukele no apareció en las boletas, la figura del líder de 39 años fue dominante en la campaña.
“La gente votó por Bukele, la gente no votó por los candidatos de Nuevas Ideas, la gente decía que iba a votar contra Arena y el FMLN”, dijo Picardo y agregó que el mandatario “fue determinante” en el resultado de las elecciones porque “es una figura potente que transfiere mucho”.
Para el analista los partidos tradicionales recibieron el rechazo de los votantes porque “no supieron resolver el tema de los grandes casos de corrupción y hay un liderazgo en crisis”.
“Es lo que la gente, los de abajo, el pueblo, esperábamos. Ya estamos cansados de promesas, ellos se llevan todo el dinero como Tony Saca (expresidente de Arena) y Mauricio Funes (expresidente del FMLN) y nosotros seguimos comiendo cuando se puede”, dijo a The Associated Press, Salvador Torres, un trabajador de la construcción.
Arena gobernó el país durante 20 años (1989-2009) y ha mantenido el control de la mayoría de las alcaldías y las decisiones en el Congreso.