-y 2-
Los días de abril de cada año tiene su historia. Por lo general es cuando culmina la cuaresma. Ya las temperaturas son mas cálidas y el viento de cuaresma deja de soplar para sumergirnos en el sopor calenturiento del verano tropical y estamos en la proximidad de los tiempos de lluvia que son esperados por los agricultores dominicanos para el mes de mayo e iniciar sus procesos de siembra.
Los 30 días calendarios del mes de abril cada uno tiene su historia tanto la general para el país como la personal a nivel social y familiar. Se destacan ocurrencias que dejan marcado al ser humano activo en su círculo de acción. Son fechas que impactan anímicamente de forma variada desde positivas hasta muy tristes con el fin de que nadie olvide el mes de abril de cada año como dice la canción.
Puede leer: La atmósfera sangrienta de abril
No tenemos que viajar muy atrás en la historia para desempolvar las ocurrencias de dos abriles inolvidables por su estela de sangre que arrastraron para alterar la vida dominicana. En abril de 1965 recordamos y vivimos que el día 24 estalló la asonada militar para deponer al Triunvirato e iniciar el supuesto proceso de reponer al profesor Juan Bosch en el poder del cual había sido depuesto el 25 de septiembre de 1963.
El rumbo torcido que tomaron los acontecimientos en los comandos militares en acción les hizo perder el control del movimiento de las tropas y las armas fueron a parar a manos de grupos de civiles radicales que obligó al gobierno norteamericano enviar un contingente de tropas y armamento para imponer el orden y evitar otra Cuba y que mas sangre corriera por las calles de Santo Domingo.
Todavía, los que ya éramos adultos, fuimos espectadores o protagonistas de los acontecimientos de aquellos días en la Capital. Era que en los pueblos se vivía una tensa calma con sus poblaciones aumentadas por el éxodo capitaleño que había emigrado de la capital para huir de la violencia.,
Retornó la calma a las calles capitaleñas alterada para acabar con la violencia con los resultados de las soluciones del conflicto con la instalación de un gobierno provisional comprometido a celebrar elecciones el primero de julio de 1966. Con las calles capitaleñas calmadas pero alteradas por la persecución de los dirigentes de izquierda que eran asesinados en plena calle por la persecución a los connotados revolucionarios que perdían la vida en una cacería de exterminio.
Y en abril de 1984 volvió a alterarse la paz cuando la situación económica por los errores del Gobierno perredeísta en ejercicio produjo una incontrolable inflación y las medidas exigidas por el FMI llevaron a la desesperación al sector más deprimido de la población que en la tarde y noche del 24 de abril de 1984 tomó las calles y carreteras obligando a una feroz represión de los militares. Se obligó al gobierno a adoptar medidas muy antipopulares que hizo estallar la rebeldía popular viviendo el pueblo momentos de angustias similares a los de 1965. Y de nuevo se recurrió al anciano líder ciego, el doctor Balaguer. Se vivió una estabilidad envidiable que llevó en 1996 al primer gobierno del PLD y del entonces joven político Leonel Fernández.-
Se inició la época de un partido nacido de una mente marxista de Juan Bosch. Los lideres del PLD iniciaban bien sus mandatos pero caían en las garras de un corrupción endémica típica de la sociedad dominicana.