POR PEDRO GERMOSEN
La ley de las primarias en las organizaciones políticas suprime la doble militancia y la práctica de las cúpulas partidarias de imponer su voluntad sobre las mayorías, lo que, entre otras disposiciones, revolucionará la forma de hacer política en la República Dominicana.

Al formular esta declaración, el senador Mario Torres, de Dajabón, dijo que la vigencia de esta ley, que traspasa a la Junta Central Electoral (JCE) la organización de las primarias, terminará con la pretensión de las cúpulas partidarias de adueñarse de los partidos.

Manifestó que la doble militancia constituye una distorsión que abulta las nóminas de las organizaciones políticas y crea falsas expectativas en el electorado.

«La distorsión es tal que si nos llevamos de la lista de miembros de los partidos, entonces hay más votantes que la cantidad que estipula la Junta Central Electoral en cada una de las elecciones», dijo Torres.

El legislador indicó que esa ley, que fue una propuesta del senador Sucre Muñoz, de Barahona, constituye una garantía para desarrollar un liderazgo político colegiado, porque con su aplicación las primarias o convenciones no serán dominio de las cúpulas partidarias, sino de los votantes.

De esta manera, sostuvo, los electores dirán a quiénes desean como candidatos presidenciales y en cada demarcación para ocupar las curules del Congreso, los puestos en los ayuntamientos y, asimismo, quiénes deben dirigir los partidos.

Al comparecer al programa Noticias del Día, que produce el periodista Euri Cabral por el canal 23, Torres negó que la JCE vaya a controlar a los partidos al amparo de la ley de primarias.

Expresó que el rol del tribunal electoral será el de supervisar las primarias o convenciones a través de sus inspectores y garantizar que esas jornadas se realicen simultáneamente para evitar la duplicidad.