En la isla de Jeju, en noviembre del 2006, se celebró el VII Foro de Diálogo entre los países del SICA y Corea del Sur. Y me correspondió representar a la República Dominicana en ese evento  junto a  los viceministros de Centroamérica y el de Corea del Sur.

Allí se acordó la realización de un foro de negocios y de inversión a fin de captar inversiones extranjeras y dinamizar el comercio entre los países de esa región y Corea del Sur. Le correspondió a El Salvador ser el país anfitrión para ese importante evento.

Ahora que la República Dominicana pasó a ser miembro permanente del Sistema de Integración Centroamericana (SICA) podría ser  el país anfitrión no solo de una cumbre  los jefes de Estado de ese mecanismo regional, sino que puede ser la sede para un evento que promueva  la atracción de inversiones extranjeras de países observadores del SICA como Corea y Japón, a la vez que   dinamice el comercio dominicano  con los países centroamericanos.

Ciertamente, es un paso de avance la incorporación del país como miembro permanente en ese mecanismo regional, porque permitirá que podamos tener una mayor presencia en ese espacio regional.

Recuerdo que en la cumbre del Sica y Corea del Sur se acordó que se promoverá el fomento de proyectos dirigidos a la pequeña y mediana empresa. Incluso, Corea del Sur dispondría de fondos con condiciones especiales para financiar y apoyar dichos proyectos. En Panamá, en otra cumbre  del 2010, Corea del Sur ofreció apoyo para el tema de la seguridad.

El planteamiento del presidente  Danilo Medina resaltando  su apoyo a la pequeña, mediana y micro empresa, que impulsa el  gobierno para la creación de empleos, la lucha contra la pobreza y la ampliación de la clase media, ciertamente ya había sido considerado en aquella cumbre SICA-Corea realizada Jeju.

De lo que se trata ahora es darle seguimiento y  aprovechar ese mecanismo regional para promover   la captación de inversiones extranjeras, el fomento de las pequeñas y medianas empresas  y fomentar  las exportaciones dominicanas a fin de  generar divisas.

Es importante resaltar la  ubicación geográfica que tiene el país con respecto a los Estados Unidos y a los países del Caribe para servir de puente al comercio y a las inversiones.

Sin dejar de rascarnos  con nuestras propias  uñas, es el tiempo de impulsar una agresiva política de atracción de inversión extranjera a fin de consolidar los logros ya obtenidos en la actual gestión y de impulsar aquellos  que nunca se han hecho. Y el espacio que ofrece el SICA es una gran oportunidad para hacerlo.