Cuando en una institución hay muchos micros poderes, con demasiada autonomía, como lamentablemente ocurre en la UASD, y que se creen “pequeños Dioses”, en sus respectivos montes Olimpos o pequeños feudos, lo que se planifique y se ejecute en materia de política comunicacional macro, siempre se verá erosionada y afectada, y su imagen grandemente lesionada.
Debido a la miopía y a la ignorancia que poseen y potencian algunos de los actores y pequeños monarcas que están al frente de algunas de sus unidades, hacen que por ignorancia ohiper ego desconozcan la esencia del Estatuto Orgánico, los Reglamentos y las Resoluciones que emanan de organismos superiores como el Claustro Mayor, el Claustro Menor y el Consejo Universitario y por consiguiente viven chocando con la realidad, tal como ocurre con el Rinoceronte.
Cuando algunos de estos pseudos “dirigentes”, llegan a algunos puestos, principalmente por vía electoral, por razones extra academia, manejos clientelares o coyunturales, muchas veces no santa, o de grupos tipos manadas, entonces comienzan a querer imponer fuerza, a tejer elucubraciones, a fabricar mentiras (mitos), manipular y a querer desconocer lo establecido legal e institucionalmente, formando de esa manera una especie de conciliábulo.
Esto genera que esas gestiones muy particulares o sui generis se disgreguen y se diluyan en conflictos pueriles yestériles yen un abrir y cerrar de ojos se desvanezcan y pasen sin penas ni glorias y dejen resentimientos y heridas que no se cicatrizan del todo.
Hay que dejar de crear fantasmas y conflictos artificiales, y ponerse a unir la familia y construir con valores sólidos el edificio. Si todos somos propositivos y aplicamos una política integral y vemos el bosque, y no nos quedamos enfocados sólo en un árbol, ayudamos a la rectoría, la cual dirige como toda una “generala” y de manera magistral la doctora Emma Polanco Melo, quien en su corta estadía ha iniciado su mandatocon buen pie, entre otras cosas, por su clara visión, su capacidad administrativa y gerencial,su personalidad bien definida, su sentido de equipoy su invaluable carisma y liderazgo.
Hasta que a lo interno, algunas mentes “fijas”, “cuadradas”, “obtusas” e “inflexibles”no comprendan la naturaleza viva y dialectal de la institución, esta seguirá siendo maleada y atacada por su vulnerabilidad interna.
Para entenderla, hay que descodificar los activos humanos que esta gran casa posee. Se tiene un personal docente con muchos conocimientos, una matrícula de grado y posgrado que ronda los 200 mil estudiantes y tan sólo 3 mil maestros, 19 campus, numerosos institutos, observatorios, 9 Facultades y más de 50 Escuelas, un sindicato de profesores, uno de empleados, una federación de estudiantes y una cantidad indeterminada de grupos y organismos que conviven en su seno.
La UASD es un referente de democracia y trabaja bajo el prisma de la transparencia y la confianza, el cual debe ser proyectado con el concurso de todos y entender que el mismo se construye y se gana comprendiendo que la lógica de la misma está implementada en sus mecanismos y documentos oficiales.
En la primada se dice “que todo está escrito”, por eso los públicos internos y “semi internos”, conocen sus deberes y derechos, por eso la actuación de cada uno de sus integrantes deben hacerse enmarcadas en los parámetros establecidos.
La UASD es una reciedumbre de valores y cosas positivas, es la institución con muchas fortalezas jurídicas e institucionales, por eso, pese a los avatares y de las amenazas internas y externas, la misma ha sabido sobrevivir y seguirá sobreviviendo.
Lo bueno que tiene esta morada del conocimiento es que sus órganos operan y está recubierta por mucha gente llena de buena voluntad y muy juiciosa y racionales. La casa de altos estudios es una verdaderatorre, que nadie la doblegará.