El subsidio al gasoil

El subsidio al gasoil

El subsidio dispuesto por el Gobierno para los transportistas de pasajeros y carga cuyos vehículos funcionan con gasoil regular, será una medida positiva y útil en la medida en que se pueda garantizar su transparencia y se la mantenga libre de distorsiones.

Es una salida encaminada a evitar aumentos en los pasajes y tarifas de carga que obedecerían a las alzas de los precios del gasoil motivadas por precios petroleros cada vez más altos.

El subsidio puede tener la virtud de funcionar como un control de inflación, pues neutralizaría, al congelar la tarifa de carga,  la influencia del gasoil en los costos y precios de todos los bienes y servicios habidos y por haber.

Pero la experiencia por otros subsidios nos obliga a plantear la necesidad de que se establezcan controles efectivos que logren disminuir los riesgos de fraudes y distorsiones que desvíen el subsidio de sus fines originales.

El subsidio al gas licuado de petróleo es uno de los ejemplos más aleccionadores en materia de distorsión.

Este subsidio fue creado para amortiguar los efectos de los precios del GLP en el presupuesto familiar y como medio para generalizar su uso en momentos en que el país trataba de contener la depredación de bosques para elaborar carbón.

Sin embargo, el beneficio de subsidio del GLP fue a parar en principio a grandes industrias y negocios, más adelante a propietarios de vehículos del transporte urbano, a los que se han agregado propietarios de yipetas y otros vehículos de alto precio y consumo.

Para tratar de corregir esta distorsión, el Gobierno ha planteado algunos procedimientos que, según cree, permitiría encauzar los beneficios del subsidio del GLP.

Como el subsidio del gasoil se pagará directamente a los interesados, habría que establecer medios de fiscalización y supervisión que impidan desvíos y distorsiones. Medios que, por cierto, no funcionaron en el caso del GLP y nada, hasta demostración en contrario, garantiza que sean exitosos en cuanto al gasoil.

El subsidio al gasoil es una medida bienintencionada, pero por razones de dominio general, con muchos bemoles que retarán la capacidad de quienes lo administren.

Día Mundial del Sida
Si algo positivo podemos decir en este Día Internacional del Sida es que hemos logrado reducir a un 0.8% nuestra tasa de prevalencia de esta enfermedad, que era de 1.2%.

Ese es un indicador de que nuestra política para inducir a evitar el contagio de Sida ha dado resultados positivos y que cada vez más gentes, particularmente jóvenes, adquieren conciencia de los riesgos de la promiscuidad y las relaciones íntimas irresponsables.

También es positivo el hecho de que aún cuando no hemos tenido éxito en la tarea, la investigación para concebir una vacuna contra el Sida nos ha permitido conocer más a fondo esta afección.

Es evidente que ha mejorado bastante nuestra imagen de país, en lo que concierne a prevención y seguimiento de los casos de Sida y, lo que es más, en el esfuerzo por encontrar una cura o un medio de inmunización.

En este Día Mundial del Sida queremos congratular  a las autoridades competentes y estimularlas a multiplicar sus éxitos.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas