El Tribunal Constitucional (TC) emanó dos nuevas sentencias que afectan a descendientes de haitianos, a quienes se les aplicó el criterio de que al nacer sus padres se encontraban ilegales o en tránsito, por lo que no les corresponde la nacionalidad dominicana, tal como externó con la decisión 168-13 del pasado 23 de septiembre en contra de Juliana Deguis Pierre.

Las decisiones aprobadas los días 26 y 30 de diciembre y dadas a conocer ayer afectan a Jenny Salita Emanier Previlma (290-13), nacida en Yamasá, Monte Plata, en 1989, y a Yanelis Sego Basil (275-13), nacida en San José de los Llanos, San Pedro de Macorís, en 1995. En ambos casos las magistradas Ana Isabel Bonilla y Kathia Miguelina Jiménez votaron disidente, al igual que en la controversial sentencia 168-13.

Emanier. El 27 de julio de 2012, mediante la sentencia 502-2012, la Cámara Civil, Comercial y de Trabajo del Juzgado de Primera Instancia del Distrito Judicial de Monte Plata rechazó un recurso de amparo que sometiera Emanier contra la Junta Central Electoral (JCE) por negarle la emisión de su cédula de identidad y electoral, alegando que en su acta de nacimiento la madre aparecía con dos nacionalidades: haitiana y dominicana.

Luego Emanier Previlma apoderó al TC de un recurso de revisión contra la sentencia 502-2012 por entender que le fueron violados sus derechos fundamentales, especialmente el de portar su cédula de identidad, ciudadanía, a la nacionalidad, empleo digno, al matrimonio, a la educación, al sufragio, al libre tránsito, a la salud y a la seguridad social.