El tema migratorio permea la sociedad y confunde a los partidos

El tema migratorio permea la sociedad y confunde a los partidos

Teófilo Quico Tabar

He expresado varias veces que los partidos y los políticos hace tiempo se globalizaron. Y globalizados al fin, no existe entre ellos grandes diferencias con respecto a temas económicos ni sobre el concepto de sociedad a que aspiran. Las llamadas izquierdas, centro y derecha de hoy, se confunden en discursos parecidos. Tal vez las únicas excepciones podrían darse en torno al uso del lenguaje de género, posición frente al aborto y los grupos LGTB. Sin embargo, sin darse cuenta, ha surgido en nuestro país un tema que podría marcar la distancia. Me refiero al tema migratorio.
El tema migratorio, y particularmente frente la inmigración haitiana, está creando las bases de la diferenciación, incluso en política. Algunos entendían que ese fenómeno solo se producía en algunos segmentos, pero no es así. Eso ha calado y permeado prácticamente todas las capas sociales, particularmente la que se denomina como gente común, que es la mayoría.
Pero no solo está marcando diferencia en los distintos grupos, sino que podría convertirse en elemento básico para la creación de una nueva plataforma, si se quiere, social y política.
Porque prácticamente ningún partido actual tiene una concepción de la economía diferente al de los demás. Podrían tener alguna visión diferenciada en cuanto a determinados aspectos, o en la forma de administrar e invertir los fondos públicos. Pero en lo básico y fundamental, todos de alguna manera, están acoplados y conviven con el status quo o establishment, local y transnacional. Y esto incluye tanto a los de oposición como del gobierno.
Es más, en ocasiones, grupos empresariales, lógicamente por cuestión de intereses, hacen planteamientos más osados que los propios partidos. Aunque muchos políticos y asesores también pertenecen o laboran para dichos grupos. Pero entre ellos prácticamente no hay diferencias conceptuales. Todos quieren estar bien con las cúpulas de poder. Y esa situación de similitud partidaria y carencia de ideologías, está empujando al pueblo, que ha pasado a ser un simple instrumento de búsqueda de votos, a inclinarse solo por simpatías personales, o por conveniencias. Y ojo con eso.
Pero el tema migratorio comenzó a permear los diferentes grupos. Ninguno está ajeno a ese fenómeno. Todos están tratando de acomodarse a esa realidad. Unos con posiciones que algunos denominan radicales; algunos haciéndose de la vista gorda, y otros tratando de darle marcha atrás a posiciones anteriores, al darse cuenta de que en realidad, ese no es un tema de élites, sino que ha calado en la sociedad entera.
Pero ese fenómeno no solo esta permeando a los partidos, sino también a las organizaciones denominadas como Sociedad Civil. A tal extremo podría esto llegar, que tendrán que agenciarse estrategias diferentes y muy coherentes para poder llevar a cabo acciones conjuntas, incluso con fines electorales.
Porque ya no solo bastarán discursos antigobiernistas o anticorrupción. De aquí en adelante, aunque alguien lo ponga en dudas, mucha gente querrá saber de qué lado está cada grupo o dirigente con respecto al tema migratorio. Muy lamentable, pero es una realidad que todos deberían advertir.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas