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Osada, espontánea, elegante y clásica, son las tres cualidades con que todos los diseñadores de alta costura que han vestido de pies a cabeza describen a la argentina Máxima de Holanda, dicen que parece haber nacido reina consorte de Holanda.
Y es que el italiano Valentino es su preferido para una ocasión especial, tanto así que será quien la vestirá este 30 de abril cuando la princesa se convierta en reina, según la revista Grazia.
De hecho Valentino fue quien la vistió el día de su boda con un clásico traje color marfil, del cual salía una cola de cinco metros y un velo de tul con diseños florales confeccionados a mano.
También suele lucir modelos del belga Edouard Vermeulen, del holandés Jan Timiniau o del argentino Benito Fernández, otros de sus diseñadores fetiche.
Todos presentan a Máxima como una de las princesas más elegantes de Europa, con una impronta joven y vanguardista, y elecciones que siempre resultan acertadas y mediáticas.
Buenos comentarios como el de Vermeulen, quien viste a la mayor parte de la realeza europea, quien dijo que sin lugar una mujer actual, activa, que ama la moda y el papel que debe desempeñar ante su familia y el país.
Es arriesgada, combina a la perfección colores, texturas, zapatos, tocados y sombreros.
«Y tiene ese carisma latino y una sonrisa deslumbrante, que la han convertido en una de las más admiradas», manifestó a la AFP.
El duelo de estilos y la comparación entre las futuras reinas y princesas es interminable. Por eso, cada aparición pública de de ellas es analizada bajo la lupa por decenas de expertos de moda, pero también debe cumplir con estrictas reglas de etiqueta.
A la argentina Máxima Zorreguieta, de 41 años, le gustan los colores llamativos. Naranjas, amarillos, rojos o vivos estampados florales pero también ocres o pasteles. No faltan los trajes sastre de corte clásico, con chaquetas entalladas, pantalones capri y faldas hasta la rodilla o los típicos jeans y las camisas blancas, muchas veces de la española Zara. Pero es en los grandes eventos, bodas reales o actos oficiales en los que la argentina destaca, añadiendo sofisticación con grandes pamelas y tocados.
