Hoy más que nunca

Gestionar estratégica y profesionalmente las relaciones públicas en un ambiente tan complejo y competitivo como el actual, debería ser una de las prioridades de cualquier empresa o institución que pretenda ser sostenible.

Hoy más que nunca las relaciones públicas, gestionadas por verdaderos profesionales, constituyen una formidable plataforma para crear relaciones, percepciones e imagen pública más allá de la información y la apariencia. El modelo de relaciones públicas que requieren las organizaciones de hoy no puede seguir siendo el que erradamente tienen en sus cabezas muchos directivos y ejecutivos, es decir creer que éstas solo sirven para gestionar columnas/pulgadas y tiempo/espacio en los medios de comunicación.

El escenario al que deben enfrentarse las relaciones públicas del presente siglo, comprende realidades como las siguientes: Respeto a la diversidad, fortalecimiento y expansión de la conciencia medioambiental, legitimación del poder de la opinión pública, democratización de los medios de comunicación, las tecnologías de la información ha permitido el surgimiento de lo que podría ser periodismo ciudadano, los consumidores cuentan con leyes que protegen sus derechos, movimientos de defensores de los derechos humanos y de la igualdad de género, entre otros temas que vienen y se van.

Todavía en pleno siglo XXI, un segmento importante de empresas e instituciones continúa viendo y aplicando estrategias y acciones tácticas de relaciones públicas como si el ambiente competitivo actual perteneciera a siglos pasados. En sus inicios, las relaciones públicas fueron utilizadas en los contextos religioso, político y empresarial como medio para manipular, persuadir y controlar la opinión pública.

En cambio, hoy es un grave error creer que las relaciones públicas se pueden seguir empleando como medio para ocultar verdades, así como fabricar una imagen pública a partir de mentiras y manipulaciones.