Se ha comprobado que las empresas e instituciones, gestionadas por líderes que tienen visión de futuro, compromiso social, inteligencia emocional y buenas relaciones humanas, son más proclives a alcanzar el éxito y a mantener una posición ganadora en los mercados que participan.

También es cierto que las organizaciones que logran establecer, de manera creativa y sostenible, un clima laboral sustentado en la confianza y el respeto, logran mayores niveles de productividad, competitividad y de reconocimiento público, por parte de sus colaboradores internos, clientes y relacionados.  En este contexto, podría afirmarse que el modelo de gestión corporativa que, desde hace 49 años, aplica el Banco Popular Dominicano le ha permitido, entre otros logros, ser percibida y valorada como una institución financiera enfocada y entregada a satisfacer las necesidades de sus clientes, así como acompañar y facilitar el desarrollo del país.

Además, la visión estratégica, entrega y lealtad que caracterizan a cada uno de los miembros que conforman el equipo directivo y ejecutivo del Banco Popular, le ha permitido a éste cumplir fielmente con las dos funciones básicas de cualquier organización lucrativa: Generar utilidades para sus accionistas y ser socialmente responsable.

Tomando como punto de referencia lo planteado, más el extraordinario desempeño financiero y la inversión social que durante el año 2012 caracterizaron al Popular, son evidencias concretas de su solidez financiera, prestigio y posicionamiento.

Como ejemplo fehaciente de los resultados de su Responsabilidad Social, en diferentes áreas sociales, el Banco Popular patrocinó recientemente el libro «Artesanía dominicana, un arte popular», de la autoría de los arquitectos Manuel Antonio de la Cruz y Víctor Manuel Durán.