CIUDAD DEL VATICANO. El Vaticano recibía el viernes a varios premios Nobel, miembros de la ONU y la OTAN y representantes de un puñado de potencias nucleares, en una conferencia que pretende ganar apoyos para cambiar el paradigma de la Guerra Fría sobre la disuasión nuclear a uno de desarme total.
El papa Francisco tenía previsto ofrecer un discurso el viernes en la conferencia, sumando su voz a la campaña que produjo un tratado de la ONU para pedir la eliminación de las armas nucleares y a un premio Nobel de la Paz para el pequeño grupo activista que fue decisivo para aprobar el tratado.
Entre los oradores en la reunión de dos días está Beatrice Fihn, directora ejecutiva de la Campaña Internacional para Abolir las Armas Nucleares, premiada con un Nobel, y Masako Wada, que sobrevivió a la bomba atómica en Nagasaki y se ha convertido en una destacada activista en favor del desarme.