El reciente viaje del presidente Leonel Fernández a Europa y Estados Unidos fue un éxito, pero también cometió errores.

Por primera vez en nuestra historia un presidente norteamericano felicita públicamente al dominicano por el manejo de su política exterior, citando sus acciones con relación a Haití y Honduras. El hecho en sí de que Leonel Fernández fuese invitado a la Casa Blanca también es un éxito, aunque la mayoría de los presidentes centroamericanos (Ortega obviamente no) ya han ido a la Oficina Oval a visitar a Obama.

La iniciativa pública del presidente norteamericano de que dependamos más de energía solar y del etanol tiene un no tan sutil trasfondo geopolítico. Quiere que dependamos menos del petróleo de Chávez. Pero esa dependencia se basa en que nos fían el crudo a 25 años al 2%.  Estados Unidos en una época nos fiaba sus excedentes alimenticios bajo esas mismas condiciones y en base a esa facilidad importamos mucho maíz y trigo. Con su recién descubierto gran excedente de gas natural en arcilla podría fiárnoslo también. Un cable submarino transportando electricidad desde Colombia tampoco competiría sin financiamiento blando. El problema no es el costo, sino el financiamiento.  El producir etanol localmente implicaría una fuerte merma fiscal y la energía solar requiere de un subsidio, excepto en muy gran escala.

El haber obtenido la sede para la reunión ministerial sobre drogas en Santo Domingo también fue un éxito. El juntarse con John Kerry, Presidente del comité de Política Exterior del Senado y con congresistas del “black caucus” también fue muy positivo. El primero tiene enorme influencia en asuntos internacionales, incluso sobre el nombramiento de embajadores (actualmente no tenemos uno) y los segundos siempre se han quejado por el tratamiento que damos a los haitianos por lo que fue oportuno, precisamente después del terremoto, darles la cara. También fue la primera vez que un presidente dominicano hace una visita oficial al Jefe de Estado alemán.

Cuando el Presidente Fernández declaró a CNN en Español que el reporte del Departamento de Estado sobre la trata (niños y prostitutas trabajando obligados, etc.) había sorprendido a los dominicanos, pues desconocían el tema, se equivocó. Ese reporte sale cada año desde hace aproximadamente 10 años y la prensa dominicana siempre lo comenta.

En el gobierno de Hipólito Mejía nos colocaron en la misma más baja categoría en que ahora nos volvieron a poner.  Probablemente sabiendo que nuestro presidente iría a la Casa Blanca, el Departamento de Estado envió a Santo Domingo, y también a Puerto Príncipe, al jefe de la unidad que elaboró ese reporte, pero éste declaró a la prensa, antes de nuestro presidente llegar a Washington, que no lo modificaría. Tal vez lo único que nuestro presidente logró al respecto fue la promesa de no aplicarnos las sanciones que esa ley contempla.

La visita al Deustche Bank y al Eximbank, acompañado nuestro presidente nada más y nada menos que por un ex funcionario de la Sun Land, muy activo en los préstamos al gobierno durante la gestión del PRD (2000-2004), es indicativo de que Leonel Fernández quiere continuar emulando a Hipólito Mejía con su política de préstamos duros y sobrevaluados. 

El que quiera más detalles sólo tiene que leer el segundo capítulo del libro “El banquero del presidente”. 

Una agencia del gobierno español garantiza contra riesgo político los préstamos de la filial española del Deustche.  Ya durante esta gestión del PLD ese banco nos ha hecho varios grandes, costosos e inconvenientes préstamos.

En cuanto al Eximbank, sólo hay que referirse a su financiación sobrevaluada en el año 2000 de los helicópteros militares.

Ahora nuestro presidente quiere que ese banco financie equipos para la policía.