PANAMA. AP. Los panameños acuden el domingo a las urnas para elegir al presidente entre Ricardo Martinelli, un empresario exitoso, y Balbina Herrera, una mujer curtida en la política, que tienen las mayores opciones según los sondeos. 

El ex presidente Guillermo Endara también postula, pero según las encuestas sus posibilidades son mínimas, por lo cual se considera que los 2,2 millones de electores optarán principalmente por Martinelli, que ofrece un cambio, o por Herrera, que de ganar prolongaría en el poder al Partido Revolucionario Democrático (PRD).  Martinelli, de la Alianza por el Cambio integrada por cuatro partidos conservadores y de derecha, hace su segundo intento por alcanzar la presidencia después de su derrota en 2004 y llega esta vez como el favorito en las encuestas.

En el caso de que el magnate de 57 años salga victorioso, pondrá freno a la alternabilidad en el poder de las dos fuerzas tradicionales –el PRD y el Panameñista, otrora Arnulfista– que se turnaron desde la caída del régimen del dictador Manuel Noriega en 1989.  El ganador gobernará este país de América Central de 3,3 millones de habitantes a partir del 1 de julio y hasta el 2014, y tendrá entre sus principales desafíos inmediatos atender la crisis de inseguridad, evitar el desplome del empleo y resolver el caos del transporte capitalino.  La campaña por los medios y en las calles cierra este jueves. 

El Tribunal Electoral dirigió un acto de clausura del proceso electoral al aire libre en una céntrica avenida capitalina en el que participaron representantes de los partidos políticos que alegraron con tonadas y banderas.  Los comicios, tienen lugar en un país cuya economía creció 8,7% en promedio durante los últimos cinco años y el desempleo se redujo de 12% a 5,6%, gracias a un aluvión de inversión extranjera y pública.

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Los desafíos

El ganador gobernará este país de América Central de 3.3 millones de habitantes a partir del 1 de julio y hasta el 2014, y tendrá entre sus principales desafíos inmediatos atender la crisis de inseguridad, evitar el desplome del empleo y resolver el caos del transporte capitalino.  La campaña por los medios y en las calles cerraron ayer jueves.  El Tribunal Electoral dirigió un acto de clausura.