POR ROSARIO TIFÁ
El brillo y aquellos materiales nobles que siempre han sido protagonistas en las grandes noches, continúan llevándose en el día y en lugares informales como la playa, resort o cualquier otro espacio de recreación y diversión.

De ahí que no sería sorpresa encontrar una pieza con canutillos, lentejuelas, encajes y pedrerías en una playa, resort, piscina o en un crucero en alta mar.

En esos lugares hay salones de fiestas donde las damas pueden exhibir un estilo más refinado, conferido por materiales exquisitos.

Ahora, el diseño de la prenda debe ser apropiado para el lugar, que generalmente exige telas frescas y atuendos sumamente cómodos.

Los bolsos, correas, collares, aretes, brazaletes y el calzado, como accesorios complementarios del vestuario, siguen siendo “cómplices” de la ropa de playa.

Los colores pasteles como verde esperanza, manzana, los rosas, amarillos claros, hacen juego perfecto en prendas  solas como los vestidos, jonsuit o intercambiables como son las blusas, T-shirts, pantalones y faldas en todos los largos.

En la actualidad están muy de moda los pantalones cortos, micropantalones, microfaldas y capri, algunos con varios bolsillos. Los lazos, cintas y ojaletes les dan un toque especial de elegancia.

En las blusas y T-shirt una rosa o cualquier otro detalle influye para que la prenda adquiera categoría dentro de esa tendencia.

Las reconocidas casas de modas Ossygeno y Maruchi han ofrecido algunas muestras de lo que se lleva en la Semana Santa, las cuales son mostradas por la modelo profesional del staff de Barbizon, Amanda del Valle.

Diseños: Tiendas  Ossygeno y Maruchi

Modelo: Amanda del Valle

Agencia: Barbizon

Fotos: José Andrés de los Santos