BOGOTA (AFP).- Luis Alberto Moreno, embajador de Bogotá en Estados Unidos elegido este miércoles para presidir el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), es un hábil diplomático que cuenta entre sus éxitos el haber asegurado la financiación de Washington para el Plan Colombia.

Moreno, que será el cuarto presidente del organismo multilateral, sucederá a partir del 1 de octubre al uruguayo Enrique Iglesias, que renunció al cargo después de 17 años para ocupar la titularidad de la Secretaría General Iberoamericana a partir del 1 de octubre en España.

Moreno jugó un rol clave en la renovación y ampliación de las preferencias arancelarias del ATPA (Acuerdo de Preferencias Arancelarias para la región Andina) en 2002, y ha sido uno de los principales impulsores de las negociaciones para un Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos y los países andinos.

Moreno, de 52 años y nacido el 3 de mayo de 1953 en Filadelfia (Estados Unidos) -aunque luego renunció a la nacionalidad estadounidense- se desempeña desde 1998 al frente de la embajada en Washington, para la cual fue nombrado por el presidente Andrés Pastrana (1998-2002), de quien fue uno de sus más cercanos asesores.

Pastrana confió en Moreno la responsabilidad de recomponer los vínculos entre Bogotá y Washington, que se habían deteriorado durante la presidencia del liberal Ernesto Samper (1994-98) por las denuncias de que éste había financiado su campaña presidencial con dinero del narcotráfico.

Sus buenos oficios, que le incluyeron granjearse el aprecio de Bill Clinton primero y de George W. Bush después, fueron considerados determinantes para que Washington aceptara entregar a Colombia más de 3.000 millones de dólares como respaldo al Plan Colombia de lucha contra el narcotráfico y las guerrillas izquierdistas.

Su desempeño le valió que el sucesor de Pastrana, Alvaro Uribe, lo ratificara en el cargo.

Moreno se graduó en 1975 en administración de empresas y economía en la Universidad de Florida y dos años más tarde obtuvo una especialización en gerencia en la Universidad de Thunderbird.

A su regreso al país se desempeñó como gerente del noticiero TV Hoy, de propiedad de la familia de Andrés Pastrana, a quien acompañó luego en la campaña que lo llevó a la alcaldía de Bogotá en 1988.

Entre 1991 y 1992 ocupó el cargo de presidente del estatal Instituto de Fomento Industrial (IFI), la principal corporación financiera gubernamental de Colombia, y luego trabajó como ministro de Desarrollo en el gobierno de César Gaviria (1990-1994); de esa cartera se retiró para dirigir la fallida campaña presidencial en la que Pastrana perdió la presidencia ante Samper.

Su candidatura al BID, trabajada por el gobierno colombiano con la habilidad de orfebre, fue abriéndose paso con el respaldo de Estados Unidos, el mayor accionista de la institución, con 30%.

«Es un honor muy grande para mí, es un honor muy grande para Colombia y tengo una inmensa gratitud para el presidente (Alvaro) Uribe y todo su gobierno», dijo Moreno a periodistas poco después de ser electo.

El diplomático colombiano sostuvo que el BID «tiene unos retos muy importantes por delante alrededor de los temas de cohesión social y pobreza» y debe «ayudar a cumplir las Metas del Milenio» en América Latina.