PUERTO PRINCIPE (AFP).- Un Consejo de Notables escogió este martes al economista y abogado Gerard Latortue como nuevo primer ministro de Haití quien de inmediato convocó a la unidad nacional para reconstruir a ese país desvastado por la violencia política.

«Quisiera reunir a todos los haitianos y haitianas, cualquiera sea su origen social, ideología u orientación política… a que me ayuden a cumplir con las grandes responsabilidades que asumiré en los próximos días», dijo desde Miami a la AFP Latortue, un ex funcionario de 69 años del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).

El nuevo gobierno será anunciado el sábado.

La creciente presencia de tropas extranjeras en Haití no impió este martes actos de violencia que provocaron dos muertos más en Puerto Príncipe mientras el ex presidente Jean Bertrand Aristide lograba el apoyo de la Unión Africana que consideró «anticonstitucional» su salida del poder.

Por segunda vez en dos días los marines abrieron fuego contra manifestantes haitianos. Después de haber dado muerte el domingo a un haitiano que los amenazaba, militares estadounidenses abatieron el lunes de noche a un taxista en una barricada cerca del aeropuerto de Puerto Príncipe.

«Hubo un haitiano muerto y otro herido» en este episodio ocurrido hacia las 20H00 locales, según el Pentágono, que habló de un vehículo que llegó hasta el retén estadounidense «a gran velocidad», no respetó la orden de detenerse y los militaren abrieron fuego.

Varios residentes erigieron durante dos horas barricadas de neumáticos encendidos para protestar por las muertes. Las barricadas fueron retiradas luego por la Policía haitiana.

En la misma zona, objeto de saqueos desde hace varios días, una persona murió como consecuencia de los disparos y otra resultó herida durante los hechos de violencia del martes de mañana, constató un periodista de la AFP.

Estados Unidos desplegó 1.100 militares en Haití, Francia 600, Chile 328 y Canadá un centenar.

Brasil, que está dispuesto a enviar 1.100 efectivos, dijo que desea liderar una fuerza de paz de Naciones Unidas en Haití.

«Varios países, incluidos miembros permanentes del Consejo de Seguridad (están) deseosos de que Brasil, por ser un país de la región, un país latinoamericano, asuma un papel de liderazgo, y nosotros estamos dispuestos», declaró el canciller celso Amorim.

El abogado estadounidense de Aristide reclamó el martes desde Miami al ministro de Justicia de Estados Unidos, John Ashcroft, que investigue las circunstancias de la partida de Aristide, a las que considera un secuestro.

El abogado Ira Kurzban exigió a Ashcroft que «investigue y procese a todas las personas que estén implicadas en el secuestro del presidente Aristide y de su mujer, Mildred Trouillot Aristide, que es ciudadana de Estados Unidos».

En la carta dirigida al ministro norteamericano de Justicia, Kurzban estima que hubo una «violación de las leyes estadounidenses por funcionarios estadounidenses» con «el secuestro» del presidente Aristide «a bordo de un avión que pertenece total o parcialmente a Estados Unidos».

El secretario general de la ONU, Kofi Annan, negó este martes tener conocimiento de un supuesto golpe de estado en Haití inspirado por Estados Unidos.

«No creo que nadie en la organización para la que trabajo apoyaría un golpe de Estado», dijo el jefe de la ONU durante una visita oficial a Canadá.

En un comunicado difundido el martes en Addis-Abeba (Etiopía), la Unión Africana señaló que era «anticonstitucional» la salida del poder de Aristide, que está en República Centroafricana desde el 1 de marzo, al día siguiente de su partida de Puerto Príncipe.

«No fue obligado a irse, no fue secuestrado», señaló el secretario de Estado norteamericano, Colin Powell. «Estaba con su gente, sus guardaespaldas, que le dijeron que era tiempo de irse. Lo aceptó, redactó su carta de renuncia y se fue», precisó Powell.

Hubo una «dimisión formal» de Aristide y «su carta de renuncia constó en actas», señaló el ministro francés de Relaciones Exteriores en respuesta a Aristide, quien afirma que sigue siendo el «presidente electo» de Haití, a donde pretende regresar.

Durante un discurso ante el Parlamento canadiense, Annan pidió «un compromiso a largo plazo» de la comunidad internacional en Haití.

La ONU lanzó un pedido de urgencia de 35 millones de dólares para Haití, para cubrir necesidades básicas de 3 millones de personas -en primer lugar de mujeres y niñas- durante seis meses, pero donde las agencias de la organización internacional siguen sin poder actuar a causa de la inseguridad.