LA HABANA. La decepcionante participación de Cuba en su primera Serie del Caribe en más de medio siglo encendió pasiones este jueves en la prensa, redes sociales y los centros laborales, donde muchos coinciden en que el béisbol cubano vive su peor crisis.

Tres derrotas al hilo ante México (9×4), Venezuela (8×5) y República Dominicana (9×2), y una apretada victoria (2×1) frente a Puerto Rico sellaron la suerte del equipo de Cuba, Villa Clara, cuyo avance a las semifinales del torneo dependía de otros resultados, que no se dieron. «El milagro quedó a mitad de camino», tituló el diario Juventud Rebelde.

«Apenas un cerrado triunfo en cuatro presentaciones solo alcanzaba para sobrevivir a merced de la suerte ajena. Y eso es lo peor que podía pasarnos», añadió.

«Hay que botar a todos los managers, directores y jefes que desde hace tiempo tienen a la pelota cubana de derrota en derrota», dijo a la AFP Isabel, una fanática de 70 años, en su oficina de La Habana Vieja.

La temprana eliminación de Cuba quedó sellada el miércoles con la victoria de Puerto Rico 5×4 ante Venezuela en este torneo regional, que se disputa en Isla Margarita (Venezuela). Puerto Rico, Venezuela, México y Republica Dominicana avanzaron a semifinales.

«No ocurrió el milagro porque a pesar de la destacada actuación de (el lanzador) Vicyohandri Odelín, el pitcheo de Villa Clara no se mostró a la altura del certamen», se lamentó el diario oficial Granma.

Cuba sólo pudo anotar en total 13 carreras y concedió 27 a sus rivales, lo que un cibernauta calificó como «la peor actuación de un elenco cubano en un torneo oficial» internacional en más de medio siglo. La isla no gana un torneo internacional desde 2006, aunque exhibe en sus vitrinas 25 títulos mundiales y tres olímpicos, así como un segundo puesto en el I Clásico Mundial de béisbol, celebrado en 2006.

El béisbol, deporte nacional de la isla, es pasión de millones de cubanos y provoca discusiones acaloradas en plazas, barrios y centros de trabajo.

«Seamos honestos: se hizo justicia. Villa Clara, el campeón cubano, llegó a la Serie prometiendo que disputaría el título, «algo en lo que defraudó», dijo el diario digital Jit, del Instituto de Deportes cubano. «No culpemos a Villa Clara, no culpemos a tal o más cuál refuerzo o a todos.

Se ha perdido porque el béisbol cubano es evidentemente inferior al de sus rivales», escribió el bloguero Reynaldo Cruz, de Holguín, 670 km al este de La Habana, quien agregó: «La crisis acabó de confirmarse» en Margarita. «Seamos repugnantemente honestos: el juego hizo justicia.

Eliminó al peor que lo había hecho, el de los lanzadores vapuleados y la defensa baja», escribió el cronista deportivo Michel Contreras en el portal oficialista Cubadebate.

«A estas alturas, de nada valen los lamentos. Los vengo escuchando desde (los Juegos Olímpicos de 2000) de Sydney», añadió. Para Juventud Rebelde, es inevitable «hacer profundos análisis sobre el estado actual del béisbol cubano», que perdió el nivel competitivo que tenía en décadas anteriores.

Una liga con muchos equipos… «En los últimos años las deserciones (de jugadores) han sido un factor extremadamente fuerte y definitorio en lo que ha venido ocurriendo, pues éstas son cada vez más numerosas (…) al tiempo que los que abandonan el país son cada vez mejores», escribió Cruz en su blog.