Banderolas en rojo, verde y blanco rodearon el salón de la Terminal Sans Soucí donde la comunidad mexicana en el país, personalidades de los sectores políticos, empresariales, diplomáticos, militares y religiosos celebraron junto a la embajada de México los 202 años de Independencia de esa nación.
El anfitrión, el embajador José Ignacio Piña, dio la bienvenida a los invitados a su llegada, acompañado del cónsul Domingo Obregón y el consejero Antonio Cruz.
Luego que los asistentes recibían un trago de margarita de chinola o de tamarindo, se paseaban por el amplio salón y degustaban las bebidas de empresas mexicanas establecidas en el país como la cerveza Corona y el ron Bacardí.
Los himnos de República Dominicana y México dieron paso a las palabras del embajador José Ignacio Piña, quien se mostró orgulloso de la historia y la cultura mexicana, destacando que es un país reconocido como la cuarta economía del mundo, a pesar de que en los últimos años ha enfrentado serias dificultades, como la del crimen organizado.
Sin embargo, manifestó que festejaban con alegría estos 202 años de su Independencia, gracias al padre Miguel Hidalgo, que dio el Grito de Dolores un 15 de septiembre del 1810.
Al finalizar su discurso, Piña pasó a realizar el tradicional Grito dando inicio a la celebración que contó con las canciones en vivo del mariachi Caballero y la degustación de una variedad de comida mexicana.