El delegado permanente de la República Dominicana ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), José Antonio Rodríguez, expresó hoy su profundo pesar tras enterarse de la partida del cantante argentino Alberto Cortez.
“Me embarga una profunda tristeza con el fallecimiento de Cortez, uno de los pocos artistas a quienes podemos atribuirle el mérito de ser un un gran hacedor de canciones”, expuso José Antonio Rodríguez.
“Lo conocí en los años 80’s, y puedo decir que, gracias a él, subí al escenario por primera vez cuando aquel miedo escénico me atrapó”, manifestó Rodríguez.
Relató que, “César Suárez me invitó a ser su contraparte y al llegar al teatro, sentí ese temor que hoy entiendo normal, pero que, en ese momento, me pedía a gritos que no saliera a cantar”.
Narró que, “Alberto, quien no me conocía, me tomó y me llevó al lateral del escenario y me dijo: , al igual que yo, también estaba nervioso”, describió Rodríguez, mientras una tímida sonrisa se dibujaba en su rostro.
“Creo que el mejor legado que nos deja Cortez es su música, una obra que quedará para nuestras futuras generaciones de jóvenes artistas”, expuso el también cantautor dominicano.
Alberto Cortez, cuyo nombre de pila es José Alberto García Gallo, nació en Rancul, La Pampa, en 1940, lanzó su primer disco en 1961 y, en su larga carrera artística, produjo medio centenar de discos, por los que recibió cuatro discos de oro. Asimismo, publicó cuatro libros de poemas y actuó en varias películas.