El embajador haitiano en el país, Fritz Cineas, manifestó  ayer  que no está satisfecho con la solución que dieron las autoridades dominicanas en el caso de la desocupación de los 800 haitianos que estaban alojados en una parroquia de Dajabón.

Cineas alegó que esos  haitianos ya tenían sus contratos de trabajos en el país y se les había concedido un permiso para visitar a sus familiares con motivo de las fiestas navideñas, por lo que vinieron a reintegrarse  a sus labores.

De su lado, el director de Migración, mayor general José Aníbal Sanz Jiminián, advirtió a los empresarios agrícolas que se abstengan de seguir contratando mano de obra haitiana de manera ilegal.

 Sanz Jiminián señaló que algunos empresarios alegan que tienen una cantidad determinada de haitianos carnetizados, pero cuando se hace un censo en las fincas se encuentra un número mayor de los  reportados a las autoridades de Migración.