Embajador panameño celebra 100 años de independencia

Embajador panameño celebra 100 años de independencia

Mario Gálvez, embajador de Panamá, tenía una marcada expresión de alegría en su rostro, o más bien de orgullo al recibir a los invitados que le acompañaron en la celebración del primer centenario de la independencia de su país natal.

Para celebrar la fiesta envueltos en la cultura de esa nación centroamericana, a la entrada del salón Alcázar del hotel Santo Domingo, Nathasha Holmes y Anabelle Martínez lucían su traje típico denominado “La Pollera”, al igual que la pequeña Isabela Altafulla, mientras su hermano Julio Altafulla y Mario Gálvez Campos llevaban puesto el traje “montuno”.

En la festividad, varias panameñas regalaron la bandera de su país y algunos detalles conmemorativos a la fecha. También lo hicieron los pequeños Isabela Julio José Altafulla, con la alegría y ternura propias de su edad.

Luego de este cálido recibimiento, los invitados –entre ellos el cuerpo diplomático y

el general de Brigada Luciano Sánchez, en representación del Jefe de la Policía Jaime Marte Martínez- empezaron a conversar amenamente sobre diversos temas.

En su discurso, el embajador de Panamá agradeció la presencia de todos los invitados. Al referirse a la historia de esa memorable fecha, indicó que el 3 de noviembre de 1903 tuvo lugar la proclamación de la independencia en la ciudad de Panamá, decisión que halló inmediato respaldo en el resto del país y declarando el territorio que actualmente ocupan como un Estado independiente y soberano con el nombre de la República de Panamá.

“Los patricios, que actuaron en ese momento histórico ocuparon el puesto en el estadio del tiempo que les tocó vivir, pues se inspiraron en el tradicional sentimiento nacionalista de los pueblos y reclamaron a la humanidad el derecho natural que la patria, llamada Panamá, tiene reservado en los espacios de las poblaciones del mundo. La franja geográfica por donde habría de construirse un canal, es patrimonio de esta nación así lo entendieron los próceres y así lo aceptaron los panameños”, precisó.

Al culminar sus palabras, todos brindaron por el bienestar y el progreso de Panamá. También degustaron un variado menú compuesto por jamón glaseado, filete de res entero, bocadillos de jamón cocido, canapés de pollo, tomates rellenos de atún, brocheta de queso con aceituna, brocheta de albóndiga de pavo, y tomaron vino Concha y Toro, whisky Chivas Regal, vodka Finlandia y gaseosas.

[b]Historia [/b]

La redacción del documento histórico (Acta de independencia del Istmo), que contiene la proclamación de la Independencia de Panamá, fue enconmendada en la mañana del histórico día 3 por el propio jefe de la revolución, don José Agustín Arango, jurista panameño de destacada participación en la vida política del país, el doctor Carlos Antonio Mendoza, prominente figura del Partido Liberal istmeño.

Don José Agustín Arango, un varón justo y noble como esos caracteres ejemplares de la historia, que exalta Plutarco en sus “Vidas paralelas” para lección perenne de civismo a la humanidad, que llevaba en su sangre el amor a la libertad, fue el iniciador, la fuerza viva, del movimiento secesionista de Panamá en 1903.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas