POR JORGE RAMOS
Los largos apagones del servicio eléctrico y los altos costos de mantenimiento de plantas energéticas, han provocado que decenas de estaciones de radio de Santo Domingo apaguen sus transmisores temprano en la noche, muchas veces hasta antes de las 11:00.

Las plantas de emergencia han pasado a ser de uso contínuo, debido a que trabajan forzosamente  más de 18 horas diarias, lo que aumenta considerablemente los costos  por concepto de combustible, mantenimiento y reparaciones.

 Algunos radiodifusores gastan más de RD$2.000 diarios en gasoil para poder mantenerse en el aire el mayor tiempo posible y cumplir así los compromisos con los anunciantes, publicitarias y espacios arrendados. 

A esas erogaciones se suma la alta tarifa eléctrica que paga una emisora de radio mediana, que operando con una potencia promedio de 5Kw sobrepasa los RD$50.000 mensuales.

 En la capital algunos radiodifurores se han visto en la necesidad de bajar potencia de transmisión en la noche o habilitar un transmisor de 1.000 vatios para disminuir la inversión y seguir dando el servicio con una planta eléctrica mas pequeña y hasta con inversores que utilizan hasta 32 baterías.

Y lo peor de esto es que no se ve ninguna luz al final del túnel, pues el administrador general de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), Radhamés Segura, ha dicho que los recursos que encontraron no le permiten cambiar de la noche a la mañana la situación que halló el Gobierno en el área energética. ¡Qué Dios nos agarre confesados!