Empleados de los distintos tribunales de la Instrucción del Distrito Nacional protestaron ayer por los precarios salarios, que no se les aumenta desde hace cuatro años, y se vistieron de negro para hacer más profunda su demanda porque el dinero no les alcanza para costear los elevados precios de los artículos de primera necesidad y el alza de todos los servicios.
Indican que es difícil la situación de trabajo en que están. Se trata de la primera generación de empleados del Poder Judicial que se atreve a manifestar su posición públicamente.
Elevaron su voz de alerta al deplorar que sus sueldos sean de diez mil y doce mil pesos al mes. Dicen que la mayoría de ellos son profesionales y que ameritan de un reajuste salarial acorde con la inflación, ya que sus ingresos no les dan para comprar alimentos, pago de transporte, combustibles y los demás servicios que costean a su familia.
Decenas de empleados de los juzgados de la instrucción caminaron dentro del Palacio de Justicia hasta hacer una parada y un minuto de silencio frente al símbolo de la justicia, la diosa Temis, para que se permita la entrega de mayor cantidad de recursos para el Poder Judicial.
Quieren que, a su vez, se eleve el salario de sus trabajadores a nivel de oficina, como: secretarios, alguaciles, personal auxiliar y mensajeros. Algunos empleados que no tuvieron el valor de sumarse al llamado, apoyaron la iniciativa observando la actividad.