POR ALEIDA PLASENCIA
La empresa Copel, S.A., nació hace 15 años para proveer sobres comerciales al mercado local. Pese a que inició sus operaciones con una maquinaria obsoleta, comprada en Estados Unidos a una empresa quebrada, Copel desde el principio superó las expectativas.
Su propietario, José Ernesto Sánchez Bergés, había proyectado producir cerca de un millón de unidades de sobres en 1992 y fabricó tres millones en ese período.
Lleva un lustro produciendo alrededor de 400 millones de unidades anuales. Sus ventas anuales ascienden a casi cien millones de pesos.
Tiene el 70 por ciento del mercado local de sobres comerciales y exporta alrededor del 15% de la producción.
Además de los sobres, Copel ofrece servicios en el área de impresos para promociones y publicidad, como afiches y volantes, entre otros.
Clientes
En sobres comerciales, entre sus principales usuarios están, bancos, compañías telefónicas, y empresas diversas.
Mientras los colmados, algunas empresas editoras y diversos tipos de compañías que realizan campañas publicitarias, se encuentran entre sus usuarios de los servicios de volantes, afiches y otros productos de este renglón que ofrece.
Copel inició con solo cinco trabajadores, incluido su dueño, quien hacía de mecánico, administrador, mensajero y hasta secretario, hoy tiene 113 empleados fijos.
Exportación
Exporta desde hace dos años. Entre sus principales mercados externos se encuentra Jamaica, donde hemos logrado escalar un espacio importante desplazando suplidores norteamericanos y otras competencias del Caribe, sostiene Sánchez Bergés. Otro mercado importante para Copel es Haití.
Actualmente, Sánchez Bergés trabaja con fines de aumentar su capacidad de producción para aprovechar el mercado norteamericano en el marco del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos.
También proyecta insertarse en los mercados de Centroamérica. Para ello ha hecho fuertes inversiones en tecnología de punta y asesoría de expertos extranjeros.
Factores de éxito
Vocación del dueño, José Ernesto Sánchez Bergés, por la manufactura.
Equipo humano identificado con los valores de la empresa.
Capacitación del personal a través de escuelas especializadas de negocios y apoyo de especialistas internacionales.
Calidad de los productos.
Énfasis en la eficiencia en los servicios.
Impulso constante en la renovación tecnológica.
Una política de trabajo arduo y capacitación gerencial.
Capacidad de trabajo.