Hoy 
BARRY MILAN, (AP).- La empresa inversora de la familia del primer ministro Silvio Berlusconi recibió el sábado una orden de pagar 560 millones de euros (797 millones de dólares) a un grupo rival por la corrupción en la compra de la editorial Mondadori.
El tribunal de apelaciones de Milán, aunque convalidó el fallo del 2009 contra Fininvest, redujo el monto original, que era de 750 millones de euros.
El fallo civil por daños se deriva de un caso en que tres socios de Berlusconi fueron declarados culpables de sobornar a un juez para que derogara un fallo a favor del industrial Carlo De Benedetti por el control de Mondadori en la década de 1990.
La empresa De Benedetti dijo que el fallo confirma que «la corrupción … organizada por encargo y en interés de Fininvest» ocasionó su pérdida de Mondadori en 1991. La hija de Berlusconi, Marina Berlusconi, que preside Fininvest, dijo que «el fallo totalmente injusto» forma parte de una campaña contra su padre.
«El fallo representa el escandaloso episodio de agresión violenta que lleva años contra mi padre, por los medios que sean necesarios y en todos los frentes, incluyendo el empresarial y el económico», afirmó Marina Berlusconi en un comunicado.
Agregó que la suma es el doble de la participación de Fininvest en el capital de Mondadori e indicó que los abogados trabajan ya en una apelación al máximo tribunal del país.
Berlusconi fue criticado esta semana al presentar un presupuesto de austeridad en el Parlamento que habría permitido a Fininvest retrasar el pago hasta ser escuchada la apelación final.
El primer ministro retiró la medida presionado por la oposición, pero incluso sus aliados dijeron no haber estado al tanto de ella. Pese a ello, el líder italiano dijo que nada le impide volverla a presentar en el Parlamento tras el fallo. «Tras ello, nadie podrá considerarla una norma solamente para Fininvest», afirmó.
Tras el veredicto inicial, Fininvest obtuvo un aval bancario en un acuerdo con el grupo rival para evitar el pago inmediato. El nuevo fallo implica el pago inmediato al contado de la suma. Empero, Marina Berlusconi insistió que «no deberíamos tener que pagar ni un euro».
