El empresario Job Franco Arias acusó ayer a la fiscal y a la procuradora de la Corte de San Cristóbal de supuestamente proteger al exfiscal Roberto Faxas y a un grupo de hombres contra quienes pesan dos querella penales, tras irrumpir armados a su empresa Franco Super Mass, en el parque industrial de Haina.
En rueda de prensa en la procuraduría general de la República, Franco Arias Pidió al pprocurador general, Jean Rodríguez, someter al Consejo disciplinario a la fiscal Diomerys Reyes, y a la procuradora de la Corte, Celeste Reyes, por alegadamente actuar en contubernio con el exfiscal Faxas.
Informó que no obstante dos querellas penales contra el grupo que encabeza Faxas, la mayoría de los cuales fueron apresados en flagrante delito, la Fiscalía los puso en libertad y a la fecha no ha solicitado medida de coerción alguna.
“La seguridad jurídica en San Cristóbal está en juego ante un Ministerio Público infuncional que no defiende los intereses de la sociedad, por lo que pedimos al Consejo del Ministerio Público procesarlas disciplinariamente y destituir a esas fiscales”, dijo Franco Arias.
Refirió que el conflicto data del año 2014, cuando recibió una carta de intención para la compra de la empresa, a la firma de Blas Abreu Abud, y que en el 2015 recibió un pago inicial con un cheque de RD$20 millones que resultó no tener fondos, además de que no cumplieron con otros pagos acordados, por lo que el contrato de venta quedó sin efecto.
Señaló que posteriormente, el grupo irrumpió en su empresa, por lo que el Juez Eliseo Pérez Medina, de Atención Permanente, dictó orden de arresto.