Tegucigalpa, (EFE).- El empresario José Lamas dijo hoy que no es cierto que él le haya advertido a la ex primera dama de Honduras Xiomara Castro, sobre un plan para matar a su marido, el expresidente Manuel Zelaya, quien fue derrocado en junio de 2009. Lamas, de origen cubano, pero que lleva muchos años viviendo en Honduras, negó desde Panamá, en declaraciones a los periodistas hondureños, las versiones que ayer dio Castro en Tegucigalpa sobre un presunto complot para asesinar a Zelaya.
«Nunca le dije que Melito (Manuel Zelaya) corría peligro si regresaba a Honduras. Yo no le dije nada de eso, Honduras es mi patria y ese es un invento de ella», enfatizó Lamas, quien cumple en Panamá una visita privada con otros empresarios hondureños.
«Exiliado soy yo y me siento en Honduras como en mi patria, la vi a ella (a Xiomara Castro) por casualidad y nunca le dije nada de eso», agregó el empresario, quien además recordó la amistad que le ha unido con la familia de Zelaya, desde que éste era un niño. En opinión de Lamas, «todo el que está en el ámbito político corre riesgos», pero lo dicho ayer por Castro en Tegucigalpa «no es cierto». «Que me lo diga en mi cara», enfatizó Lamas, un reconocido empresario maderero.
La ex primera dama hondureña compareció ayer en una rueda de prensa en Tegucigalpa, en la que dijo que Lamas, a quien definió como «amigo de la familia», le recomendó que Zelaya no se arriesgase a regresar al país por haber un plan para atentar contra su vida. Castro no precisó detalles sobre el plan, pero subrayó que eso no cambiaba la intención del exgobernante de regresar a Honduras, en una fecha que no indicó.
«Él (José Lamas) nos informó de que hay un plan para un atentado, no soy la persona que debe aclarar», expresó Castro, aunque según algunos versiones de medios locales de prensa la ex primera dama mencionó que la alerta del empresario le llegó a través de «una amiga» de ambos, que no identificó.
Zelaya y Castro residen desde el 27 de enero de 2010 en República Dominicana, el mismo día que asumió el actual presidente hondureño, Porfirio Lobo, quien ayer reaccionó diciendo que no había que desestimar la denuncia de la ex primera dama y que se haría una investigación.
«La obligación nuestra es investigar, es la obligación que tenemos, y lógicamente tiene que hacerse la investigación de inmediato», dijo Lobo en una rueda de prensa antes de viajar a Panamá para asistir anoche a la inauguración de una agencia de un banco hondureño junto a un grupo de empresarios. EFE