Santiago de Chile. Una mediática campaña en contra de la reforma laboral que promueve el Gobierno de Chile iniciaron hoy los empresarios del país a través de un vídeo en el que critican duramente la iniciativa que se tramita en el Congreso. “El proyecto no considera la visión de quienes dan trabajo en Chile” es una de la ideas que plantean en el vídeo representantes de distintos sectores productivos, quienes aseguran también que la reforma gubernamental “no es el camino».

La reforma laboral, una de las promesas emblemáticas del Gobierno de la presidenta Michelle Bachelet, inició su trámite parlamentario a principios de este año y actualmente se encuentra en la Comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados.

El proyecto, entre otras cosas, prohíbe el reemplazo de trabajadores durante las huelgas legales, pretende ampliar el derecho a negociación colectiva y fortalecer a los sindicatos. Estos son los cambios más importantes a la legislación laboral en Chile desde la década de 1980, cuando durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) se impuso la normativa hasta ahora vigente, que disminuyó sustancialmente los derechos de los trabajadores.

Los cambios impulsados por la Administración de Bachelet son respaldados por la multisindical Central Unitaria de Trabajadores (CUT), que los ve como un piso mínimo para eliminar la desigualdad entre el mundo laboral y empresarial. “Que a los trabajadores se no amplíe el derecho a la negociación colectiva, que se elimine el reemplazo de los trabajadores en huelga y que se establezca el sindicato como único instrumento negociador es el punto de inicio de nuestras aspiraciones”, señaló a los periodistas la presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa.

Sin embargo, los empresarios no miran con buenos ojos los cambios y aseguran que instalarán un nuevo factor de inestabilidad en el país, cuya economía crecería este año en torno a un 3,0 por ciento, con una aletargada inversión privada y deprimido consumo.

EL presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA) Patricio Crespo dice en el vídeo, transmitido a través de las redes sociales, titulado “Una reforma laboral para todos”, que los empresarios están abiertos al diálogo para “llegar a un acuerdo nacional». Ello, porque uno de los aspectos que reclaman los industriales es que su punto de vista no fue considerado al momento de elaborar el proyecto enviado al Congreso.

Sin embargo, el Gobierno rechaza el argumento empresarial y asegura que todos los sectores fueron escuchados antes de que se elaborara el paquete de cambios laborales. “Un proyecto de ley no es para un sector. Los proyectos de ley y las políticas públicas no se hacen pensando en un grupo, se hacen pensando en todos y en el país”, dijo la ministra del Trabajo Javiera Blanco, saliendo al paso de la arremetida empresarial contra la reforma laboral. Blanco rechazó también los argumentos de que la reforma laboral afectará a la economía y particularmente al empleo y la productividad.

Respecto al trámite que viene del proyecto la ministra señaló que “buenas ideas se pueden incorporar y eso es lo que hemos hecho». “En un espacio democrático, bienvenidas las opiniones siempre que sean para construir país, no sean para retroceder, no sean para detener”, añadió.