Empresarios no quieren sorpresas políticas

Empresarios no quieren sorpresas políticas

La Asociación de Empresas Industriales de Herrera (AEIH) pidió al gobierno que no dé sorpresas de índole política y económica que impliquen descontrol de la masa monetaria y abogó porque mantenga una posición de regulación del gasto público.

José Ernesto Sánchez, presidente de la AEIH, exhortó al gobierno a mantener los controles existentes sobre la masa monetaria, para evitar que haya un exceso de circulante que afecte la tasa de cambio otra vez.

Manifestó que si el gobierno no vuelve a dar sorpresas de carácter político y económico, como pasó cuando hace poco el Estado adquirió las dos Empresas Distribuidoras de Energía del Norte y del Sur (Edenorte y Edesur), el nivel de incertidumbre disminuye y regresa la calma en los agentes económicos y por ende, la estabilidad de la economía.

Consideró vital recuperar la estabilidad macroeconómica con el objetivo de que las empresas puedan seguir haciendo los ajustes necesarios y reponerse de la situación difícil que tienen.

En esa tesitura, Sánchez se mostró esperanzado en que se haya dado al traste con el proyecto de Ley de Lemas y que en el marco de la campaña electoral, el gobierno tenga en cuenta que con relación al gasto público, debe mantener una postura seria.

Resaltó que el Fondo Monetario Internacional (FMI) está observando todo lo que se está haciendo en la República Dominicana, en materia de gasto y por tanto, el gobierno debe actuar con pulcritud.

Con relación a la reducción de la tasa de cambio experimentada en la última semana, dijo que ésta ha sido muy rápida y que tiende a desestabilizar los planes de las empresas.

Señaló que una baja tan considerable en tan poco tiempo, como la ocurrida en la tasa de cambio últimamente, crea la percepción en la gente de que los precios de los productos se van a reducir de un día para otro.

No obstante, añadió que lograr la baja obtenida últimamente en la tasa de cambio, ha implicado un esfuerzo grande por parte del gobierno.

Por tanto, Sánchez consideró necesario tratar de que los agentes económicos confíen en las acciones del gobierno e incluso, evitar los gastos superfluos propios de la época de campaña electoral.

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