La Federación de Asociaciones Industriales (FAI) consideró positivo que, en lo inmediato, el gobierno se disponga a trazar un plan para encarar la amenaza de la crisis alimentaria.
En ese sentido, la entidad sugirió poner en marcha políticas coherentes para resolver el problema eléctrico, así como alternativas frente a los altos precios de los combustibles.
Definió como atinada la postura del secretario de Economía, Planificación y Desarrollo, ingeniero Temístocles Montás, en el sentido de que la administración del presidente Leonel Fernández deberá tener la disciplina fiscal como un norte importante.
Ya pasaron las elecciones y ya deben quedar atrás las teorías y el derroche. Ahora se impone trabajar por el país con sentido de previsión para dar respuestas efectivas a una población que ha depositado su confianza en las actuales autoridades para seguir gobernando y que espera soluciones frente a la carestía de los alimentos, los hidrocarburos y la crisis eléctrica, señala la FAI en una nota.
En lo que respecta a la ola alcista en los precios de los alimentos, el gobierno debe tomar en cuenta cuatro propuestas del economista Pavel Isa Contreras, de la oficina local del Programa Mundial de Alimentos (PMA), porque, desde su punto de vista, aportan soluciones, señala. En ese sentido la FAI cita que Isa Contreras ha sugerido promover la lactancia materna, establecer un almuerzo, además de reforzar el desayuno, en el Programa de Alimentación Escolar (PAE), expandir las plazas agropecuarias en las que se venden comestibles a precios asequibles.
Favorece la FAI que las políticas públicas para mejorar la situación alimentaría de la población sean monitoreadas.
Las claves
1. Teorías
LA FAI pide dejar atrás la teoría y el derroche. Insta a aportar soluciones a problemas del país.
2. Políticas públicas
Las políticas públicas para mejorar la situación alimentaría de la población deben estar acompañadas de un buen proceso de monitoreo y evaluación, señala la FAI. Argumenta la entidad que de esa manera se contribuiría a la transparencia con relación a la rendición de cuentas.