La Asociación Dominicana de Industria Eléctrica (ADIE) advirtió que el monto de US$280 millones de dólares asignados para el subsidio eléctrico en el Presupuesto General del 2012 no será suficiente y presiona al sector con metas difíciles de alcanzar.

Tito Sanjurjo, presidente de la ADIE,  estimó que esa cantidad apenas podría alcanzar para el subsidio de los primeros cuatro meses del próximo año.

El pasado año el subsidio eléctrico alcanzó los US$750 millones y para este año  se espera que supere los US$500 millones.

Sanjurjo entiende  que las presiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) y de otros organismos multilaterales   por un presupuesto balanceado están forzando al sector eléctrico.

“Poner 280 millones de dólares para el año que viene absolutamente no dan, ni aunque hagan milagros los administradores de la distribuidoras van a poder bajar las pérdidas”, expresó.

Mientras que Otto González, vicepresidente de ADIE, recordó que el subsidio no sólo cubre el déficit de las distribuidoras para  cubrir sus costos, sino que incluye a  las instituciones del Estado que no pagan su factura y cuyo  monto en el 2010 fue de US$120 millones.

Ajustada a la ley. Sanjurjo dijo que la ADIE quisiera que la tarifa eléctrica sea ajustada, tal como se hace con los precios de los combustibles. 

Recordó que la ley manda a que la tarifa de electricidad sea ajustada  cada mes   de acuerdo a los precios de combustibles y el cambio de la  moneda. “Hasta que no se logre ese balance vamos a seguir con estos déficit que se crean puntualmente”, dijo Sanjurjo.

Los ejecutivos de la ADIE abordaron estos temas al participar en el Almuerzo del Grupo de Comunicaciones Corripio. En el encuentro participaron además  Milton Morrison, vicepresidente de ADIE; Marcos Cochón, gerente de la Generadora de Puerto Plata, y  Roberto Herrera, gerente de la Compañía Eléctrica de San Pedro de Macorís.

Subsidio no estimula el  ahorro.  Morrison advirtió que en países como la República Dominicana el subsidio no incentiva el ahorro, ya que la gente se preocupa poco por hacer un uso racional de la energía.

En esa línea,  Cochón puso de referencia que  muchas grandes industrias  que pagan la tarifa real y hasta más cara,  han implementando programas de eficiencia energética con las que  han logrado bajar el consumo en un 20 por ciento.

“La participación de los  consumidores que reciben subisidios ha aumentado, principalmente porque los que no lo reciben están implementado políticas  de ahorro que están reduciendo su consumo total y su participación en el consumo”, señaló.

Cochón indicó que al aumentar  la participación de consumidores  subsidiados,  el problema financiero del sector se hace más pesado.

Advirtió además que si el consumidor no recibe una señal de precios que lo oriente a ser más eficiente en su consumo va a seguir consumiendo de manera  inefectiva  y la carga seguirá siendo mayor.

Se estima que  el 41  por ciento de la tarifa eléctrica está subvaluada porque recibe subsidio del gobierno.

Del tema también  habló Roberto Herrera, quien  explicó  que parte de las distorsiones se debe a la existencia de  varios  tramos tarifarios, en algunos casos los que no reciben subsidio  pagan la energía hasta en un precio más alto que lo normal.

Dijo, además, que el problema está  en el gran grueso de consumidores que reciben  menos de 700 kilovatios en diferentes tramos de tarifas y que son los  subsidiados.

Explicó que en la mayoría de países donde se subsidia el consumo eléctrico se beneficia a  consumidores por debajo de 100 kilovatios. “Se supone quien requiere un subsidio no tiene recursos para tener aire acondicionado, lavadora y otros equipos”, dijo. 

Privatización

Sobre la posibilidad de pasar las empresas de distribución y transmisión al sector privado, planteada por los candidatos presidenciales Hipólito Mejía y Danilo Medina,  el presidente de la ADIE, Tito Sanjurjo, se mostró a favor de la propuesta.

Sin embargo indicó que un nuevo esquema  de privatización debe  ser uno en el que el gobierno garantice un subsidio durante un período  de tres o cuatro años, de forma decreciente y con ajuste de tarifa.

Sostuvo además, que debe haber un compromiso de inversión por el adquiriente.

Manifestó que con este esquema el gobierno tendrá la certeza de que en cuatro años  no tendrá que pagar más subsidios.

Dijo que aunque a veces el tema es difícil de aceptar, ya que hubo un esquema de capitalización que luego se revertió, sin embargo en los primeros años de ese proceso las distribuidoras empezaron  a bajar las pérdidas.

Recordó que el fue el desfase   tarifario por ajustes que le creó un hueco en el capital de trabajo que hizo imposible seguir bajando las pérdidas.

“Apoyamos que se considere ponerla en manos privadas otra vez”, expresó Sanjurjo.