Empresas zona franca piden
medidas de emergencia

Empresas zona franca piden<br/>medidas de emergencia

POR ALEIDA PLASENCIA
La Asociación Dominicana de Zonas Francas (ADOZONA) pidió a las autoridades que con carácter de emergencia tomen medidas encaminadas a detener y revertir el proceso de quiebra de las empresas de este sector.

En ese sentido, en un comunicado de prensa ADOZONA solicita tomar disposiciones que garanticen la pronta puesta en vigencia del DR-CAFTA y el establecimiento gradual de un tipo de cambio que refleje la realidad de los niveles de costos internos y le devuelvan competitividad al sector exportador. Adicionalmente a lo anterior, dice que tiene la esperanza de que los demás puntos de la agenda más amplia discutida desde hace tiempo con las autoridades, sean acogidos con acciones concretas, “ya que estamos en una situación que no admite dilaciones».

Si se llevarán a cabo estas sugerencias, añade, el sector podría relanzarse, lo que cree llenaría de esperanzas a tantos dominicanos que esperan el pan del trabajo para satisfacer sus necesidades perentorias.  Refiere la situación de nuevos cierres de empresas y la insostenible situación económica que afecta a las  industriales de exportación establecidas en zonas francas e indica que al respecto se han agotado sucesivas reuniones por un período de dos años con las autoridades.

En ese ámbito «consideramos que el país ha ido perdiendo su capacidad de competir y esto aplica, tanto a empresas orientadas a la exportación como a aquellas otras que dirigen su producción al mercado interno». Añade que hay razones básicas y directas de los problemas recientes en el área de zonas francas.

Entre ellas destacan el incremento sostenido de los costos internos al ser expresados en dólares, debido a la no correspondencia de la tasa de cambio con el incremento del índice de precios al consumidor, la presencia de los países asiáticos en el mercado de los Estados Unidos, el costo e insuficiencia del fluido eléctrico, la rigidez presente en algunos aspectos del mercado laboral y la ausencia de libertad en el transporte de mercancías, entre otras.

Posibles medidas de alivio, como la eventual puesta en vigencia del DR-CAFTA, se han estado demorando desde hace ya más de un año, por lo que empresas que contaban con ese nuevo marco como parte de su estrategia de sobrevivencia ya están cerrando y otras se encaminan a lo mismo, al verse frustradas sus expectativas, advierte.

Sostiene que lo más grave es que el país no tiene nada  previsto ni tampoco es posible sustituir el importante aporte que las zonas francas hacen a la economía y al bienestar social, por lo que cree que esta situación es de pérdidas para todos.

 El modelo de zonas francas, lejos de estar agotado, puede rendir frutos óptimos a la sociedad, sostiene, tras alegar que no se trata de retórica.

Cree imperativo tomar medidas que frenen y reparen el daño ya ocasionado y entiende que, de lo contrario, otras empresas quebrarán en el corto plazo, despedirán a sus empleados, se perderán ingresos de divisas y se intensificará el malestar social.

«Adicionalmente serán afectadas una gran cantidad de empresas y empleos en el mercado local, cuya existencia depende en gran medida de las actividades de zonas francas», concluye ADOZONA.

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