Precedido de una tortuosa transición por los intentos del presidente Joaquín Balaguer de desconocer la voluntad popular expresada en las elecciones de mayo de 1978, el 16 de agosto de ese mes asumió el poder Antonio Guzmán Fernández, empresario y prominente miembro del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), que lo llevó como candidato.

El respeto a las libertades públicas fue característico de su mandato. Se le considera artífice de la democracia.

Despolitizó las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, promulgó una ley de amnistía que puso en libertad a los presos políticos y determinó el regreso de los exiliados. Nacionalizó la minera Rosario Dominicana, entonces explotada por extranjeros.

En 1979 enfrentó con éxito el impacto y los estragos del ciclón David y la tormenta Federico.
Guzmán se suicidó el cuatro de julio de 1982, 43 días antes de terminar su mandato. Lo sustituyó Jacobo Majluta en su condición de vicepresidente de la República.

Salvador Jorge Blanco. El 16 de agosto de 1982, luego de una campaña en la que tuvo como principales contrincantes a Joaquín Balaguer y a Juan Bosch, ascendió a la presidencia Salvador Jorge Blanco, abogado, escritor y catedrático universitario que pese a haber iniciado carrera política en la Unión Cívica Nacional, pasó al Partido Revolucionario Dominicano en 1964.

Su gobierno se vio afectado por crisis económicas fruto de negociaciones con el Fondo Monetario Internacional. En abril de 1984, el desmesurado aumento de precio de los artículos de primera necesidad, dio lugar a movilizaciones en las que resultaron muertos decenas de manifestantes.

Enturbiaron su gestión, además, sucesos como el tiroteo en un hotel, en 1985, donde se celebraba la convención del PRD para elegir candidato presidencial, y el secuestro y posterior asesinato del banquero Héctor Méndez.

Al concluir su gestión, fue acusado de desfalco y corrupción por el gobierno de Balaguer, por lo que fue encarcelado. Procesado y declarado culpable en juicios televisados que calificó de “persecución política”, en 2001 se anuló la sentencia.

Murió el 26 de diciembre de 2010.

Vuelve Balaguer. Lo que parecía imposible debido al terror, la intolerancia y la persecución política reinantes en sus primeros doce años de gobierno, ocurrió en mayo de 1986 cuando Joaquín Balaguer resultó nuevamente electo.

Gobernó hasta 1996, con mayor respeto a la disidencia política, aunque ocurrieron casos como la desaparición del profesor universitario y escritor Narciso González.

En 1994, José Francisco Peña Gómez, candidato a la presidencia por el PRD, denunció que Joaquín Balaguer, su opositor en las elecciones, hizo fraude, y se firmó el “Pacto por la Democracia” que redujo a dos años el mandato del dirigente reformista.

PLD al poder. El 16 de mayo de 1996 participaron en las elecciones Peña Gómez, Jacinto Peynado, del Partido Reformista Social Cristiano y Leonel Fernández, del Partido de la Liberación Dominicana. Fue necesaria una segunda vuelta.

Peña fue derrotado por el apoyo de los reformistas al abogado, escritor y maestro Leonel Fernández, mediante un acuerdo denominado “Frente patriótico”.

En 1998 se celebraron elecciones congresuales y municipales ganadas por el PRD y sus aliados. Ese año falleció Peña Gómez, líder histórico de esa agrupación.

Corto período del PRD. En el 2000 volvió a gobernar el PRD, representado por el agrónomo Hipólito Mejía, quien se había enfrentado en el proceso electoral a Danilo Medina y a Balaguer.

Durante su administración, el país fue afectado por una crisis financiera en la que destacó el fraude del Banco Interamericano (Baninter), que generó altas tasas de inflación y devaluación de la moneda.

En 2004 intentó reelegirse, pero fue derrocado por Leonel Fernández, que gobernó hasta 2012, siendo sustituido por su compañero de partido Danilo Medina, presidente hasta el presente.