SAO PAULO, AFP. Brasil reconoció a los pacientes afectados por enfermedades incurables el derecho de elegir con anticipación si desean o no recibir cuidados extremos cuando estén en una fase terminal.
La resolución del Consejo Federal de Medicina (CFM), que fue publicado hoy en la prensa, precisa que el «testamento vital» permitirá a los enfermos definir «los cuidados y tratamientos que desean o no recibir cuando sean incapaces de expresar» su voluntad.
La medida podrá ser adoptada por toda persona mayor de edad y plenamente lúcida y se pondrá en marcha cuando el enfermo se encuentre en un estado vegetal o en fase terminal.
La facultad de rechazar un tratamiento o de llevar adelante una «muerte digna» ya está en vigor en otros países como Argentina, Estados Unidos o España. «En ningún caso la vida del paciente será reducida», subrayó Roberto d’Avila, presidente del CFM, al precisar que «la eutanasia sigue estando prohibida».
«Pero defendemos la idea del derecho a una muerte natural, sin intervenciones tecnológicas (…) que a veces pueden tranquilizar a las familias pero que no siempre responden a la voluntad del paciente», añadió en declaraciones recogidas por la prensa.
Este «testamento vital» no podrá ser aplicado más que en caso de enfermedades degenerativas como el cáncer, Alzheimer, Parkinson u otras que provoquen en su avance un estado vegetativo.
El paciente deberá registrar su voluntad ante un notario. Hasta ahora, la decisión recaía sobre la familia.