En el  “corazón” de la selva Amazónica

En el  “corazón” de la selva Amazónica

POR SUSANA VERAS
MANAOS, BRASIL.- Para algunas personas, organismos e instituciones, cuidar y proteger los recursos naturales y mantener el equilibrio entre el desarrollo del hombre y la naturaleza es casi un dolor de cabeza. En  Manaos, Brasil, ubicado en el mismo centro de la selva amazónica, es una cultura, es la vida misma…

Con pocos o muchos “reales” en los bolsillos, dispuestos a la aventura, con ropa sencilla, equipaje ligero y zapatos “bajitos” y cómodos, inicia este recorrido por una de las zonas más privilegiadas del mundo, no sólo por sus “activos”, en reservas, especies y animales exóticos, amenazados con la extinción, sino por la diversidad de un punto de la geografía “hecha a mano” por el Altísimo, que se convierte en un destino, sin igual para los amantes del turismo ecológico y de aventura. Una experiencia, única y divertida para ver de cerca la naturaleza.  

El lente mágico del fotógrafo francés Jean Arthus-Bertrand ha captado parte de este territorio y aunque él alcanzó la inmensidad en su muestra “La Tierra Vista desde el Cielo” donde incluye Manaos, vivirlas, sentirlas y creerlas no tiene similitud.

Y es que Manaos refleja en cada rincón, ese nuevo concepto de la industria sin chimenea que  casi “se vende sólo”, y donde se dejan relegadas por completo las suntuosas líneas maquillaje, “la socialit锠 y los tacones altos para respirar aire limpio y fresco y poder conversar, a la vez, con gente sencilla, que defiende con su alma su cultura, la cual no muchos pueblos “descubiertos” pueden exhibir.

A ahí está parte de su gran valor: en ofrecer tradiciones y las raíces de sus pobladores indígenas, el manejo sostenible de los recursos y  su dignidad.

Es un destino donde fácilmente el viajero puede lograr una desconexión gigantesca del ruidoso mundo exterior e industrializado. Pero también Manaos invita a salir de compras por sus diversas tiendas de calzados, electrodomésticos, joyas y artículos para el hogar, o simplemente realizar un recorrido nocturno complementado con una rica “felloada y una caipirinha” (comida y bebida típica de Brasil), o cualquiera de sus ofertas gastronómicas de excelente prepación y variedad, para la cual dan prioridad a sus productos agrícolas, frutos y pescados.  

Entre detalle y detalle

Poco se conoce en Manaos de República Dominicana, pero cuando mencionamos peloteros, merengue y Juan Luis Guerra, damos algunas pistas.

A modo de agradecimiento, las facilidades y rapidez otorgadas por el Consulado de Brasil que resolvió papeles y documentación migratoria, en menos de cinco horas.

La periodista Yamira Taveras de El Caribe encabezó una enorme lista de anécdotas inolvidables durante todo el viaje; bailó desde “Compadre Pedro Juan” del eterno Luis Alberti, hasta varios ritmos de la selva y “La Gasolina” de Dadee Yankee.

Manaos queda a más de cuatro horas de ciudades famosas como Sao Paulo, Brasilia o Río de Janeiro. Celebra su propio carnaval en junio. 

Su gente 

Los pobladores de Manaos rápidamente expresan su amabilidad, sensibilidad,  conocimiento sobre su cultura y atractivos, así como su apego a la puntualidad y organización estrictas.

El visitante puede apreciar estructuras coloniales, casitas “pintadas con cerámica”; en contraste con altos y modernos edificios y el cuidado e higiene de las calles. Su completa iluminación permite desplazarse con tranquilidad en las noches y escuchar en su profundidad, desde cualquier punto, las notas casi sublimes de una sinfonía creada por las aguas de los inmensos ríos Negro y Amazonas y todas sus especies invitadas. 

La travesía inició en el Aeropuerto Internacional Eduardo Gómez  a través de las “alas” de la  línea Copa que se estrenaron recientemente en Santiago de los Caballeros y que unen en Panamá al “Hub de las Américas” punto o encuentro aéreo internacionalmente conocido.

De repente te encuentras, con uno de los más populares, legendarios y tradicionales teatros del mundo, “El Amazonas”, una estructura colonial que enmarca en cada uno de sus rincones la riqueza y el amor a las artes de esta tierra,  la cual se dio a conocer al mundo por la industria del caucho, uno de sus árboles más emblemáticos.

A muy breves pasos, el mercado central en el que se puede encontrar con hierbas, souvenires, secretos y detalles de esta tierra calurosa, donde se hace un festival al plátano.

Enclavada en la selva amazónica, Manaos, capital de Amazonas, es el mayor estado brasileño. Una metrópolis con casi 1.5 millones de habitantes. La ciudad, que cuenta con parques ecológicos y una serie de áreas verdes que parecen no tener fin, llama la atención por sus bellezas naturales. Es una región de contrastes, en la que se mezclan la naturaleza exuberante con un complejo industrial de alta tecnología y los vestigios del pasado.

Copa organiza viaje por la selva Amazónica

Entre los hoteles visitados por el grupo dominicano están el Century y Tropical, éste último concurrido por personalidades del jet set internacional como Pelé, Felipe de Borbón, entre otros.

El “fam trip” organizado por la aerolínea Copa, representada en el país por Elena Rodríguez, y la operadora Paradise Turismo, presidida por Claudia Mendoza, reunió a destacadas firmas locales vinculadas al campo de las agencias de viajes entre las que se destacan Yoselin Vicente, de Agencia de Viajes S. S.; Dayra Pérez, Agencias de Libia; Milagros Rivera, de Gamma; Elvira de Sánchez y Juan Sánchez, de Ozama Travel; Carlos Alonso, de Turinter, y Héctor Hernández, así como la presidenta de Ary Productions, Aridia Taveras, su equipo integrado por Mayra Ventura, Alba Aquino y Leo Ureña, así como Yamira Taveras, de El Caribe.

Dentro del staff de anfitriones se destaca a Daniel Toledano, el guía cultural y de ciudad Francisco; a la ejecutiva de Cuentas, Celia Viana y el inolvidable guía “Artemio”, personaje singular que conserva la ingenuidad de un indio de la selva amazónica mezclado con el “tigueraje” de un típico dominicano de la costa norte.  

Entre los hoteles y lugares visitados por el grupo dominicano están el Hotel Century; localizado en el Milenium Mall, el Restaurant “Chopana” y el Hotel Tropical, una propuesta arquitectónica concurrida por personalidades del jet set internacional como Pelé, Felipe de Borbón, entre otros.

Además, el hotel cinco estrellas “Ecopark”, propiedad de David Israel, al que se llega en bote o helicóptero, y que tiene entre muchas riquezas, ríos de arena blanca, habitaciones construidas en el centro de la selva, guacamayos, monos, iguanas, jicoteas  y otras especies que conviven con los visitantes.

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