El doctor Héctor Mateo plantea en su más reciente libro, “Reflexiones y anécdotas”, la posibilidad de que para mediados de este siglo exista lo que define como “cardiología sin cardiólogos”. Y es que, según él, “resulta entretenido y fascinante hacer ejercicios imaginarios de predicción sobre el futuro de la cardiología  ante los avances que se van registrando en esta disciplina”.

Proviniendo el planteamiento de él, que es la figura más emblemática de la cardiología dominicana,  el tema ha interesado a mucha gente en los círculos literarios y científicos de Santo Domingo.  Advierte que el progreso por lo general es incierto y lento debido a sus grandes limitaciones de costo, regulación y el tiempo que se necesita para comprobar y evaluar el resultado de los nuevos descubrimientos, el doctor Mateo subraya que “hay la percepción de que muchas cosas que aparentan ser ciencia ficción, como ha ocurrido en el pasado, podrían tornarse realidad  en un mediano o largo porvenir”.

“Por primera vez se puede ya prever el futuro en que la ciencia médica pudiera derrotar a las enfermedades cardiovasculares así como fue capaz de derrotar la polio, la viruela y otras plagas del pasado”, destaca el doctor Mateo, presidente de la Fundación Dominicana de Cardiología y director general del Instituto Dominicano de Cardiología.

Cita a seguidas  la serie de técnicas, procedimientos y descubrimientos que se tiene en agenda para los próximos años, lo que sustenta que existe la posibilidad de que para la celebración del centenario del American Collage  of Cardiology, en el 2049, “algunos radicales propongan la abolición de la especialidad de cardiología como ocurrió con los especialistas de la poliomielitis”.