En el gobierno nadie se acuerda
de la austeridad de Juan Bosch

En el gobierno nadie se acuerda<BR>de la austeridad de Juan Bosch

POR GERMAN MARTE
El economista Bernardo Vega afirmó ayer que el gasto corriente de la administración pública  es excesivo y ha seguido el ejemplo del gobierno anterior (de Hipólito Mejía), y señaló que la gestión de Leonel Fernández ha aumentado la nómina pública, a pesar de que en su  discurso de toma de posesión habló de austeridad.

El también historiador y escritor dijo que  el gobierno ha mejorado su capacidad recaudadora, pero “lo que no está haciendo es gastarlo bien”.

 Recalcó que en el país hay nómina pública excesiva.

Criticó que en la administración peledeísta ya nadie se acuerda de la austeridad de Juan Bosch, quien el mismo día  que se juramentó bajó los salarios, despidió muchos empleados y en el Palacio se brindaba agua de coco en lugar de bebidas caras.

Al ser entrevistado en el programa El Telematutino, Vega lamentó que la inversión pública se concentre en obras no prioritarias como el Metro de Santo Domingo.

A su juicio, el gobierno debería reducir  sus gastos e invertir el dinero en ayudar a los pobres, realizar los pequeños proyectos  que demandan las comunidades.

BAJO LA SOMBRA DEL FMI

  A partir de enero próximo, según el historiador, al gobierno y al país les conviene tener un “Acuerdo Sombra” con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Explicó que un “Acuerdo Sombra” consiste en la firma de una carta de intención en la cual se dice que se van a mantener determinados niveles de gastos y un endeudamiento limitado a cierto punto.

En todo caso, subrayó, se trata de condicionalidades muy ligeras en comparación con un acuerdo formal con el Fondo.

“Es sombra en el sentido de que no se gira dinero, no se toma prestado al FMI” y por tanto la condicionalidad es mucho menos fuerte que bajo un acuerdo formal, pero tiene toda la ventaja de que crea confianza en la población y los inversionistas”.

Esa, en su opinión, es una solución intermedia entre mantener un acuerdo y no tener ninguno.

Indicó que ahora mismo son pocos los países latinoamericanos que tienen acuerdo con el Fondo, porque los precios de exportación están muy buenos, como sucede con el níquel que exporta el país.

LOS POBRES PAGAN MAS IMPUESTOS

Vega explicó que el sistema impositivo dominicano se caracteriza por ser muy regresivo, es decir, que los pobres pagan más impuestos que los ricos.

 Por ejemplo, adujo, bajo la Ley de Incentivo Turístico si alguien compra una propiedad en la zona turística del Este y la revende a los dos años, aunque se gane el doble no paga nada de impuesto.

En cambio, un pobre compra cualquier producto y paga el 16% de ITBIS.

“Entonces hay algo malo con el sistema tributario. Es demasiado regresivo y no grava a los ricos como debe ser”.

 

PREVÉ ABSTENCIÓN ELEVADA EN EL 2008

“Esta será una campaña insípida”

A juicio del  historiador y economista Bernardo Vega las elecciones  del 2008 se caracterizarán por una alta abstención, poco ánimo de parte de los votantes, donde no habrá grandes temas de debates, al punto que  nadie se atreverá a sacar “los  trapitos sucios” sobre la corrupción; empero sí se invertirá  mucho dinero durante la campaña.

“Esta será una campaña insípida”, expresó Vega.

En su opinión las simpatías del electorado estarán divididas fundamentalmente entre Leonel Fernández (PLD) y Miguel Vargas Maldonado (PRD).

En cuanto al candidato reformista, dijo que  Amable Aristy Castro está a la espera de una segunda vuelta “para ofrecerse al mejor postor”, ya sea el PRD o el PLD, pero no es un candidato importante.

A juicio del también experto en encuestas políticas, los electores dominicanos votarán mayoritariamente por el presidente Leonel Fernández porque realmente la “otra alternativa” es muy mala.

Dijo que la gente ve a Leonel Fernández mejor que a su gobierno, su partido y   gabinete, no obstante el  problema del Presidente candidato es cómo lograr que se fijen en él y no en su  gabinete y su partido. “Lamentablemente el Presidente no habla mucho del pueblo”.

El historiador dijo que es muy difícil que la intención del voto cambie radicalmente en la primera vuelta, pues generalmente la gente mantiene su intención de voto.

 “El cambio violento viene si hay una segunda vuelta”, cuando el voto de los que quedaron en tercer lugar tiene que decidirse, dijo Vega al ser entrevistado en el programa El Telematutino que se transmite por Telesistema, canal 11.

 IMPACTO DE  CAMBIOS

El haber buscado líderes de segunda o tercera categoría de partidos de la oposición, algunos de ellos “pequeñísimos”, en tanto que da una sensación de desesperación del gobierno buscando votos y de que la calidad de la administración pública se va deteriorando aún más por estar incorporando políticos pierde más votos que la capacidad de esos líderes de tercera categoría para conseguir adeptos, consideró Bernardo Vega al referirse a los nombramientos de funcionarios a partir del 16 de agosto.  Dijo que el pueblo aspira que se cambie la calidad de los servidores públicos, pero los cambios recién introducidos por el presidente Fernández no logran ese propósito, “todo lo contrario”. Señaló específicamente el caso de Max Puig:  “¡Qué forma de premiar al que lucha por los intereses nacionales!”.

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