En el palacio

<p>En el palacio</p>

POR MANUEL JIMÉNEZ
Lo cierto es que el presidente Leonel Fernández, al menos desde que se inicio el presente año, luce a distancia de lo que es propiamente el ajetreo en pro de la reelección y concentrado totalmente en la administración del gobierno. Desde la primera semana de este mes, el gobernante ha encabezado numerosas reuniones de trabajo con los diferentes gabinetes de gobierno, actos de inauguración de obras y asistido a cada uno de los encuentros en el marco del proceso final de consultas relacionado con la reforma constitucional.

Esto no implica que el gobernante ha renunciado a una legitima aspiración a continuar en el cargo, pero es obvio que su interés fundamental y prioritario en su agenda es impulsar las diferentes políticas públicas, tanto en el plano económico, social, de infraestructura física y de solución a uno de los problemas más trastornador de la actividad nacional, como es la crisis de electricidad. Al menos, en este mes, el presidente Fernández ha encabezado tres consejos de gobierno, sumado el que está previsto para este martes en la mañana en el Palacio Nacional y su agenda internacional ha estado limitada a un rápido viaje a Nicaragua en ocasión de la asunción al poder del presidente Daniel Ortega.

Esta salida, según dicen mis fuentes, estuvo más bien forzada por el vínculo que la República Dominicana ha forjado con Centroamérica, más que en el interés personal del jefe de Estado de estar presente en esos actos. A las reuniones de los consejos de gobierno, hay que sumar un encuentro con los gobernadores provinciales comenzando el año para discutir la implementación de diferentes planes, especialmente en el ámbito de la ejecución de obras de infraestructura, algunas de ellas en proceso de construcción y otras pendientes de iniciarse. “De lo que se trata es de poner en acción el gobierno, pues el éxito de la reelección está estrechamente relacionado con el buen desempeño del gobierno, y eso es justamente lo que se persigue”, me comentó un alto funcionario público. “De ese éxito no sólo saldrán beneficiados los hombres y mujeres del Partido de la Liberación Dominicana, sino el pueblo en general, que es el interés fundamental del presidente Fernández, me agregó.

rrrrr

El presidente Fernández ofreció inequívocas pruebas de que se presentará a buscar una nueva postulación cuando en el mes de diciembre visitó poblaciones del Este, el sur y el norte del país para encabezar encuentros con dirigentes de base, intermedios, medios y nacionales del PLD, en los que notoriamente ofreció pruebas de fuerza a lo interno de su partido. Pero da la impresión de que desde entonces, ha preferido tomar mayor control de las riendas de la administración pública y dejar la conducción de la campaña interna en pro de la reelección en manos de su equipo político, al frente del cual está el secretario de Industria y Comercio, Francisco Javier García. Una fuente palaciega me confío, además, que Fernández luce y se siente tranquilo en este aspecto, pues todas las encuestas en su poder lo colocan en una ventajosa posición frente a su antiguo principal colaborador y ex secretario de la Presidencia, Danilo Medina. “Eso no quiere decir que haya que descuidarse”, aclaró esa fuente, que reconoce en Medina a un político hábil, buen estratega y de gran arraigo a lo interno del PLD.

“Lo que sucede es que el presidente Fernández tiene un posicionamiento insuperable a lo interno y externo del PLD, algo muy difícil de superar, al menos en lo que resta para la celebración de la Convención fijada para el mes de mayo”, agregó, asegurando que en caso de que ese proceso se pospusiera para una fecha más larga, más se favorecería a los intereses políticos del actual gobernante.

“El tiempo es un aliado importante del presidente Fernández”, insistió en asegurar ese alto funcionario. Pero existen otros funcionarios, como es el caso de Juan Francisco Santamaría, de la Oficina de Gestión Presidencial, que entienden que alargar el proceso eleccionario interno afectaría cada vez más la imagen del PLD y mantienen una posición a favor de un entendimiento entre el presidente Fernández y Medina. Ambos, sin embargo, se han distanciado en la práctica. En las ocasiones en que han coincidido en las reuniones del Comité Político no se han dispensado un saludo ni siquiera formal, pese a que a los dos se les reconoce decencia y caballerosidad. En sus discursos, el presidente Fernández no ha hecho una solo alusión que incluya el nombre de quien hasta hace poco fuera su estrecho colaborador, por lo que cualquier entendimiento entre ambos deberá estar forzado por la circunstancia, y no tan solo por meras y formales gestiones de intermediarios.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas