Claire Gallen
WASHINGTO.AFP. El fuerte aumento del desempleo, que alcanzó 5,5% en mayo en Estados Unidos, contra 5,0% en abril destaca la fragilidad de una economía golpeada por la crisis inmobiliaria y la disparada del precio del petróleo en pleno año electoral, subrayan analistas.

 La primera economía mundial suprimió 49.000 puestos de trabajo, tras perder 28.000 el mes anterior, anunció el departamento de Trabajo este viernes.

 La cifra no es tan mala como la que esperaban los analistas, que preveían 60.000 despidos.

 Pero el salto del desempleo, el más importante en 22 años, decepcionó al mercado, que esperaba una tasa de sólo 5,1%.

 Ante estas cifras inesperadas, la primera reacción de los economistas fue de perplejidad.

 «Es bastante desconcertante», opinó Robert MacIntosh, de Eaton Vance, para quien la tasa de desempleo de mayo es «una aberración».

 El departamento del Trabajo dijo que las cifras de desempleo podrían ser muy volátiles a mediados de año debido a varios factores, como la llegada al mercado de «una cantidad importante de trabajadores», en particular de jóvenes tras el fin de los cursos.

 Los mercados reaccionaron muy mal a las cifras. El índice Dow Jones de la bolsa de Nueva York perdía 2,07% hacia las 16H0 GMT.

 Para algunos analistas, las cifras subrayan una verdad un poco olvidada estos últimos tiempos: la fragilidad de la economía.

 «Luego de este informe, sería un error excluir la posibilidad de una leve recesión», dijo John Lonski, de la agencia Moody’s.

 Pero la Casa Blanca salió este viernes al cruce de estos temores, afirmando que las cifras de desempleo se deben a un enlentecimiento del crecimiento económico pero no a una recesión.

 «Las cifras de empleo son coherentes con las tasas de crecimiento económico lento que hemos tenido, es un crecimiento lento, pero sigue siendo positivo», dijo Scott Stanzel, portavoz de la Casa Blanca. Aafirmó que gran parte del alza del desempleo se explica por el retorno al mercado de trabajo de personas que habían abandonado la búsqueda, por ejemplo gente jubilada.

 «Vuelven porque no tienen más remedio, porque tienen problemas para llegar a fin de mes con la suba de los precios de la energía», explicó.

 La disparada del precio del petróleo agrava las dificultades de los consumidores estadounidenses, que ya enfrentaban la crisis inmobiliaria, que amenaza con contagiar al resto de la economía.

 Esta amenaza aparece claramente en el informe: como era de esperar, en el sector de la construcción hubo muchos despidos (-34.000 puestos), así como la industria (-26.000). Pero también ocurrió lo mismo en la distribución (-27.000) y los servicios a empresas (-39.000).

El candidato demócrata Barack Obama dijo que el informe sobre desempleo es «muy inquietante» y rubrica «el fracaso de la política de Bush».

La clave

Baja en empleos

Según el Departamento de Trabajo de los Estados Unidos, esta suprimió 49.000 puestos de trabajo, tras perder 28.000 el mes anterior. Dijo que las cifras de desempleo podrían ser muy  volátiles a mediados de año debido a varios factores, como la llegada al mercado de «una cantidad importante de trabajadores», en particular de jóvenes tras el fin de los cursos.